El PSV ganó en el campo del Ajax, su
principal rival, (0-2) y dio un golpe de mano a la liga de Holanda
que ahora domina con gran autoridad, beneficiado, además, por el
tropiezo del Feyenoord, otro de los perseguidores, que no pudo pasar
del empate en su campo contra el AZ Alkmaar.
El húngaro Balazs Dzsudzsak abrió el marcador al borde del
descanso y el Otman Bakkal sentenció en la segunda parte un choque
aplazado desde el 16 de diciembre por los altercados que se
sucedieron en los alrededores del estadio de Amsterdam.