En medio de su desgracia, River bromea con derrota de Boca ante el Milán
El River Plate, que lleva una década
sin títulos internacionales y no gana un campeonato argentino desde
2003, se mofó hoy de la derrota de Boca Juniors, su acérrimo rival,
a manos del Milán italiano (2-4) en la final del Mundial de Clubes
disputada el domingo en Yokohama (Japón).
Los riverplatenses pegaron en las calles de Buenos Aires y en el sitio web del club unos carteles en los que aconsejan a la presidenta argentina, Cristina Fernández, que nombre a los de Boca "embajadores en Japón, así no vuelven más" al país.
"Mejor quedate en tu segundo barrio (Japón), porque en el primero (La Boca) no te quieren ni ver", apunta otro cartel.
"Bajate los afiches para saludar a tus primos (por los boquenses) y compartir con los amigos", proponen en www.cariverplate.com.ar, el sitio oficial del club.
En Buenos Aires y sus alrededores los riverplatenses pegaron además carteles en los que aparecen una foto del brasileño Kaká, la figura del victorioso Milán, junto a la del delantero y capitán de Boca, Martín Palermo, al que le endosan la leyenda "popó".
"En Japón hace kaka", apunta otro cartel de los riverplatenses.
La web de River Plate sostiene en su "balance del último semestre" que "a pesar de que los resultados no fueron buenos, se pueden rescatar ciertos detalles positivos" que "servirán a futuro".
En este sentido, destaca el "regreso" del delantero Ariel Ortega, ídolo de los hinchas, la "reaparición" del ariete internacional colombiano Radamel Falcao García y la "aparición" del chileno Alexis Sánchez.
Aduce, además, que el décimo cuarto puesto que ocupó el equipo en el Torneo Apertura 2007 de la liga de primera división, que ganó el modesto Lanús, "resulta más bien un poco mentirosa" en vista de la renuncia del técnico Daniel Passarella y el desánimo de los jugadores al ser eliminados en semifinales de la Copa Suramericana por el Arsenal argentino, que finalmente ganó el título.
Daniel Passarella dimitió a mediados de noviembre, poco después de la derrota ante Arsenal en cumplimiento de la promesa de que dejaría el cargo si el equipo no ganaba algún título este año.
Diego Simeone asumió la dirección del River el sábado pasado con la promesa de revertir la mala racha del equipo, que no gana un trofeo internacional desde la conquista de la Supercopa suramericana de 1997 y lleva tres años y medio sin un campeonato local.
Los riverplatenses pegaron en las calles de Buenos Aires y en el sitio web del club unos carteles en los que aconsejan a la presidenta argentina, Cristina Fernández, que nombre a los de Boca "embajadores en Japón, así no vuelven más" al país.
"Mejor quedate en tu segundo barrio (Japón), porque en el primero (La Boca) no te quieren ni ver", apunta otro cartel.
"Bajate los afiches para saludar a tus primos (por los boquenses) y compartir con los amigos", proponen en www.cariverplate.com.ar, el sitio oficial del club.
En Buenos Aires y sus alrededores los riverplatenses pegaron además carteles en los que aparecen una foto del brasileño Kaká, la figura del victorioso Milán, junto a la del delantero y capitán de Boca, Martín Palermo, al que le endosan la leyenda "popó".
"En Japón hace kaka", apunta otro cartel de los riverplatenses.
La web de River Plate sostiene en su "balance del último semestre" que "a pesar de que los resultados no fueron buenos, se pueden rescatar ciertos detalles positivos" que "servirán a futuro".
En este sentido, destaca el "regreso" del delantero Ariel Ortega, ídolo de los hinchas, la "reaparición" del ariete internacional colombiano Radamel Falcao García y la "aparición" del chileno Alexis Sánchez.
Aduce, además, que el décimo cuarto puesto que ocupó el equipo en el Torneo Apertura 2007 de la liga de primera división, que ganó el modesto Lanús, "resulta más bien un poco mentirosa" en vista de la renuncia del técnico Daniel Passarella y el desánimo de los jugadores al ser eliminados en semifinales de la Copa Suramericana por el Arsenal argentino, que finalmente ganó el título.
Daniel Passarella dimitió a mediados de noviembre, poco después de la derrota ante Arsenal en cumplimiento de la promesa de que dejaría el cargo si el equipo no ganaba algún título este año.
Diego Simeone asumió la dirección del River el sábado pasado con la promesa de revertir la mala racha del equipo, que no gana un trofeo internacional desde la conquista de la Supercopa suramericana de 1997 y lleva tres años y medio sin un campeonato local.