Henry disfruta de su primera noche mágica y acaba con las dudas en el Barcelona

Enviado por carlosefrain el Dom, 30/09/2007 - 08:45

Le ha costado, pero después de malgastar claras oportunidades de gol, el delantero del Barcelona Thierry Henry consiguió desatascarse, recuperó su olfato goleador y ante el Levante firmó su mejor y más completa actuación como azulgrana.

El gol era la asignatura pendiente de Henry hasta ayer. Su juego ha estado al nivel esperado, pero en el área distaba mucho de ser aquel delantero tranquilo, certero y seguro que maravilló en el Arsenal y en la selección francesa. Parecía haber sufrido una metamorfosis.

Su escasísimo acierto en los metros finales había comenzado a generar ciertas dudas, aunque la parroquia azulgrana ha tenido paciencia y confianza en el galo. También el técnico, Frank Rijkaard, ha apostado por Henry. Y la espera tuvo su premio, porque ante el Levante confirmó que no se le ha olvidado marcar.

El francés Thierry Henry certificó con su 'hat trick' que es una apuesta segura y fiable, y un jugador determinante que debe aportar y sumar a un Barça que, en ocasiones, ha dependido en exceso del acierto de Messi.

El acierto del astro francés, quien logró el primer tanto del Barça fuera de casa esta temporada, permitió desatascar un partido sin ritmo y en el que los azulgranas no impusieron la misma velocidad que en anteriores encuentros. El conjunto catalán, hasta el primer gol, desplegó un juego ramplón y poco brillante, aunque dada la enjundia del rival no necesitó mucho más para ganar.

Henry necesitaba un encuentro en el que sentirse protagonista. El delantero había completado buenas actuaciones en los últimos partidos, incluso marcó ante el Olympique de Lyon, pero no estaba nada afortunada en los últimos metros. A su habitual despliegue físico, y a sus constantes diagonales y desmarques sumó el tesoro más preciado para un delantero: el gol.

Y ayer hizo tres diferentes. En el primero demostró su oportunismo al aprovechar un rechace del meta Storari. Más bello fue el segundo después de convertir en gol un sensacional pase de Messi. Fue el típico tanto del francés. Y en el último una mezcla de oportunismo y frialdad para completar una noche redonda.

El 'hat trick' logrado ante el conjunto valenciano tiene un enorme valor para el jugador y, sobre todo, para el equipo. Seguro que el francés deja atrás sus obsesiones, coge confianza y vuelve a ser un futbolista desequilibrante.

Curiosamente, la mejoría de Henry ha coincidido con la baja de Ronaldinho, quien puede reaparecer mañana ante el Stuttgart. El francés ha demostrado sentirse más cómodo cuando no juega el brasileño por las características de uno y otro. Veremos qué hace Rijkaard para solucionar este problema.

En cualquier caso, la suerte para el Barça es que Messi sigue marcando las diferencias. Un partido más, fue el jugador clave del Barcelona. Participó en los dos primeros goles, marcó el cuarto y le anularon otro por falta a Álvaro. El crecimiento de este jugador es brutal y juega con tanta confianza que parece imparable.

El miedo que infunde a los contrarios es espectacular y de ello se benefician sus compañeros. Habrá que ver hasta cuándo puede seguir jugando a este nivel, pero mientras el argentino siga así parece que el Barça va a disfrutar de un periodo de bonanza y de éxitos.

Y de ello quiere participar el capitán, Carles Puyol. El defensa volvió a jugar tres meses después de lesionarse en Suráfrica. Lo hizo de central por las molestias de Milito, pero el buen rendimiento del argentino y de Márquez pueden obligarle a jugar en el lateral derecho.

Sea donde sea, el regreso del capitán es una gran noticia para sus compañeros. Al margen de sus cualidades como jugador, al grupo aporta espíritu competitivo y ganador, algo siempre necesario en cualquier colectivo.

Poco a poco, Rijkaard recupera efectivos y el equipo vuelve a su mejor nivel. Por primera vez ganó fuera de casa esta temporada y ya suma tres triunfos consecutivos en Liga. Nadie duda del equipo y del técnico, y todos comienzan a pensar que el Barça será el rival a batir. Parece que va por el buen camino. EFE