Baptista se reivindica y quiere ayudar más al equipo.
Julio Baptista, delantero brasileño del Real Madrid, reivindicó su figura con un gol de chilena al Real Betis, que impulsa su participación en el equipo dirigido por Bernd Schuster, al que desea "ayudar más".
Baptista mostró hoy la cara más alegre de Valdebebas. Había dormido poco. Fue el protagonista del triunfo ante el Real Betis y abandonó el estadio Santiago Bernabéu a la 1.20 horas de la madrugada tras atender pacientemente a todos los medios de comunicación.
Había jugado 12 minutos en cuatro partidos de Liga y se cansaba de calentar la banda ante el Real Betis. Saltaron al campo Arjen Robben y Robinho, marcó Raúl de penalti y cuando Baptista esperaba que el último cambio fuese el argentino Fernando Gago, para contener el resultado, el dedo de Schuster le señaló a él.
Llegó el momento que esperaba. La hora de reivindicar su imagen. "Estoy feliz, porque siento que he aprovechado la oportunidad que me dieron. He cogido autoestima. Demostré que si tengo minutos puedo ayudar al Real Madrid y demostrar que soy un gran jugador. Digno para jugar en este equipo".
Contento por el gol protagonizado, Baptista lo recordó en una conversación mantenida con Efe. Un tanto que trajo a la memoria de muchos aficionados del Bernabéu al mexicano Hugo Sánchez.
"Fue una jugada rápida en la que veo que el balón sale rechazado tras ir a por él Diarra y no me lo pensé. Es una acción que suelo realizar en entrenamientos. Es intuitiva. Una chilena era la única forma de rematar. Me salió bien. Lo necesitaba", señaló.
No era la primera vez que Baptista firmaba un gol de chilena. Con Brasil lo había logrado en un amistoso ante Cataluña. Precisamente la selección de su país es lo que le obsesiona. Tiene miedo a perder su condición de internacional de Dunga si no juega con el Real Madrid.
"En mi carrera siempre he dado mucha importancia a la selección brasileña. Es muy importante para mi. Ahora, se inicia una fase de partidos importantes para acudir al próximo Mundial y no me lo quiero perder. Para ello debo seguir luchando como estoy haciendo", manifestó.
Tras una temporada cedido al Arsenal, Baptista ha tenido claras sus intenciones desde que se incorporó en Hannover (Alemania) a la pretemporada del Real Madrid. Quiere triunfar con el Real Madrid y consciente de la alta competencia en la delantera, eligió estar a las órdenes de Schuster antes que un traspaso al Milán.
Su momento más bajo fue el pasado fin de semana, en Valladolid. Tras formar parte de la expedición vio el partido desde la grada. Schuster había elegido a Wesley Sneijder para, algo cargados sus músculos, quedarse en el banquillo.
"Tengo una buena relación con Schuster. Nos hemos dicho siempre las cosas claras. Es verdad que tras Valladolid lo he pasado mal pero el trabajo siempre acaba dándote una oportunidad. Sólo pienso en aprovechar cada oportunidad que me llegue", dijo.
Baptista, una persona siempre rodeada de su familia, se refugia en las sagradas escrituras en sus malos momentos. "Aprendo mucho de la Biblia y la leo con frecuencia. Ayuda a entender los malos momentos y te hace sacar fuerzas. También mi familia me rodea en lo malo y lo bueno".
Tras el partido ante el Real Betis, Baptista recobra la fe en sus posibilidades y espera colaborar más con el Real Madrid. Tiene las cosas claras. "La tranquilidad y la paciencia son los mejores compañeros para superar los altos y bajos del fútbol. Quiero ayudar más al equipo".
Baptista mostró hoy la cara más alegre de Valdebebas. Había dormido poco. Fue el protagonista del triunfo ante el Real Betis y abandonó el estadio Santiago Bernabéu a la 1.20 horas de la madrugada tras atender pacientemente a todos los medios de comunicación.
Había jugado 12 minutos en cuatro partidos de Liga y se cansaba de calentar la banda ante el Real Betis. Saltaron al campo Arjen Robben y Robinho, marcó Raúl de penalti y cuando Baptista esperaba que el último cambio fuese el argentino Fernando Gago, para contener el resultado, el dedo de Schuster le señaló a él.
Llegó el momento que esperaba. La hora de reivindicar su imagen. "Estoy feliz, porque siento que he aprovechado la oportunidad que me dieron. He cogido autoestima. Demostré que si tengo minutos puedo ayudar al Real Madrid y demostrar que soy un gran jugador. Digno para jugar en este equipo".
Contento por el gol protagonizado, Baptista lo recordó en una conversación mantenida con Efe. Un tanto que trajo a la memoria de muchos aficionados del Bernabéu al mexicano Hugo Sánchez.
"Fue una jugada rápida en la que veo que el balón sale rechazado tras ir a por él Diarra y no me lo pensé. Es una acción que suelo realizar en entrenamientos. Es intuitiva. Una chilena era la única forma de rematar. Me salió bien. Lo necesitaba", señaló.
No era la primera vez que Baptista firmaba un gol de chilena. Con Brasil lo había logrado en un amistoso ante Cataluña. Precisamente la selección de su país es lo que le obsesiona. Tiene miedo a perder su condición de internacional de Dunga si no juega con el Real Madrid.
"En mi carrera siempre he dado mucha importancia a la selección brasileña. Es muy importante para mi. Ahora, se inicia una fase de partidos importantes para acudir al próximo Mundial y no me lo quiero perder. Para ello debo seguir luchando como estoy haciendo", manifestó.
Tras una temporada cedido al Arsenal, Baptista ha tenido claras sus intenciones desde que se incorporó en Hannover (Alemania) a la pretemporada del Real Madrid. Quiere triunfar con el Real Madrid y consciente de la alta competencia en la delantera, eligió estar a las órdenes de Schuster antes que un traspaso al Milán.
Su momento más bajo fue el pasado fin de semana, en Valladolid. Tras formar parte de la expedición vio el partido desde la grada. Schuster había elegido a Wesley Sneijder para, algo cargados sus músculos, quedarse en el banquillo.
"Tengo una buena relación con Schuster. Nos hemos dicho siempre las cosas claras. Es verdad que tras Valladolid lo he pasado mal pero el trabajo siempre acaba dándote una oportunidad. Sólo pienso en aprovechar cada oportunidad que me llegue", dijo.
Baptista, una persona siempre rodeada de su familia, se refugia en las sagradas escrituras en sus malos momentos. "Aprendo mucho de la Biblia y la leo con frecuencia. Ayuda a entender los malos momentos y te hace sacar fuerzas. También mi familia me rodea en lo malo y lo bueno".
Tras el partido ante el Real Betis, Baptista recobra la fe en sus posibilidades y espera colaborar más con el Real Madrid. Tiene las cosas claras. "La tranquilidad y la paciencia son los mejores compañeros para superar los altos y bajos del fútbol. Quiero ayudar más al equipo".