Una tarde desapacible, muy ventosa, con el cielo totalmente encapotado y con aparato eléctrico, aunque sin lluvia, presidió el entrenamiento del Sevilla FC en el estadio Olímpico de Atenas, donde mañana se mide al AEK en el partido de vuelta de la eliminatoria previa a la Liga de Campeones.

Los veinte futbolistas desplazados a Atenas se ejercitaron sobre un terreno algo seco y duro, incluido el lateral derecho brasileño Daniel Alves, el lateral izquierdo serbio Ivica Dragutinovic y el portero Andrés Palop, los tres con distintas molestias desde el partido del pasado viernes en Mónaco en la Supercopa ante el AC Milan.

Ninguno de ellos parece que tendrá problemas para disputar el choque, previsto para las 21.45 horas (local), una menos peninsular española.

El entrenador sevillista, Juande Ramos, permitió el acceso de los periodistas durante el primer cuarto de hora de la sesión y posteriormente trabajó a puerta cerrada aspectos tácticos que se utilizarán mañana frente al conjunto que dirige el técnico español Lorenzo Serra Ferrer.

Mañana, los jugadores tienen previsto dar un paseo por las inmediaciones del hotel de concentración y después descansar hasta el desplazamiento al estadio para el encuentro. EFE