Federer pierde un set ante Isner pero avanza a octavos, donde le espera López.

Enviado por carlosefrain el Sáb, 01/09/2007 - 20:30
 El número uno del mundo, el suizo Roger Federer, avanzó a octavos de final del Abierto de Estados Unidos, tras vencer al prometedor estadounidense John Isner, el primero en arrebatar un parcial al helvético, próximo rival del español Feliciano López.

Isner obtuvo los suficientes méritos para convertirse en una de las sensaciones del torneo y una expectativa alentadora para el tenis de su país, ávido por gestar un tenista solvente que haga frente a Federer.

La raqueta de Carolina del Norte tiene una pinta prometedora. Metió el miedo en el cuerpo del campeón y llevó la euforia a la pista principal del recinto Arthur Ashe. La conquista del primer set en el tie break fue una advertencia efímera. Un aliento breve para el local, que estimuló la reacción del suizo. Federer dio la vuelta al choque sin contemplaciones (6-7 (4), 6-2, 6-4 y 6-2).

Isner ha rentabilizado la invitación del torneo y se ha dado a conocer definitivamente. Superó consecutivamente al finlandés Jarko Nieminen, vigésimo sexto favorito y el sudafricano Rik De Voest, procedente de la fase previa.

El estadounidense exprime al máximo sus 205 centímetros para dominar el juego, ataviado con un estilo similar al de su compatriota Andy Roddick. Un saque intratable y una fuerte derecha definitiva.

Fue así como sorprendió al número uno del mundo. Isner llegó a sacar a 225 kilómetros hora. Firmó dieciocho saques directos. El porcentaje fue superior en el primer parcial, que le llevó a tomar la ventaja en el marcador. Sin embargo, desde entonces, su mente empezó a sentir vértigo, probablemente. Y presión. Federer dio la vuelta al choque.

El tenista suizo, que ha finalizado un tránsito apacible por la parte superior del cuadro principal, se enfrenta en octavos de final al español Feliciano López, que ganó en cuatro sets a otra de las esperanzas locales (3-6, 6-3, 7-6 (5) y 7-5), Donald Young, aunque con menos determinación y los recursos más limitados que Isner. EFE