Brasil en mano a mano con EEUU, que mantuvo el dominio en jornada de récords
Estados Unidos mantuvo hoy dominio en la natación panamericana, en una jornada en la que nuevamente Brasil batalló con dureza contra el país del norte y que adicionalmente ofreció la emoción de varios récords del torneo.
Los representantes de Estados Unidos capturaron un total de ocho medallas, tres de oro, tres de plata y dos de bronce, mientras los nadadores del país anfitrión de estos Juegos ganaron también tres de oro, además de una de plata y otra de bronce, para un total de cinco.
Canadá, con una medalla de cada metal, marcó también presencia en la jornada, en la que Venezuela tuvo la satisfacción de ver a dos de sus representantes en el podio: Arlene Semeco, plata en 50 metros libres y Albert Subirats, bronce en los 100 metros mariposa.
Argentina ganó una plata con el veterano pero aún eficaz "Tiburón" José Meolans, en los 100 metros libre, carrera en la que demostró que aún posee una gran potencia, sobre todo en el segundo tramo de la carrera, en la que arremetió desde atrás para arrebatarle el segundo puesto al estadounidense Gabriel Woodward.
"Todavía no ha llegado el momento de retirarme", dijo Meolans a los periodistas en la zona mixta del centro acuático María Lenk, en declaraciones en las que añadió que los argentinos aún pueden esperar logros de su parte.
Puerto Rico ganó un bronce con sabor a desencanto de Vanessa García Vega en los 50 metros libres, modalidad en la que la deportista boricua, según admitió, se había preparado para más, incluso para el oro.
La lluvia de récords comenzó temprano en la piscina, pues ya en la primera final de la jornada, 400 metros libre masculinos, el estadounidense llevó la marca panamericana a 3:49.77 minutos, superando los 3:50.01 que el venezolano Ricardo Monasterio había establecido en los Juegos de Santo Domingo 2003.
En los 50 metros estilo libre femeninos, la brasileña Rebeca Gusmao detuvo los cronómetros en 25.05 segundos e hizo trizas la ilusión de la venezolana Arlene Semeco, que tenía el récord anterior desde ayer cuando hizo 25.14 segundos en las semifinales.
Aunque no se trataba de una final, el estadounidense Scott Clary no quiso ser menos y en las semifinales de los 200 metros espalda nadó en 1:58.78 minutos para dejar atrás la marca de 1:59.33 que el brasileño Leonardo Costa había establecido en los Juegos de Winnipeg'99.
"César tocó el Cielo", es una frase que calza perfectamente con lo ocurrido en los 100 metros estilo libre, en los que el brasileño Cèsar Cielo, la figura más aplaudida por la "torcida" instalada en las gradas, detuvo el reloj en 48.79 segundos.
Cielo superó hoy los 49.19 segundos que un compatriota suyo legendario había establecido en Winnipeg'99: Fernando Scherer, que el pasado marzo, unos meses antes de los juegos, anunció su retirada, a los 32 años, porque ya no se sentía motivado, según manifestó entonces.
La guinda de la torta la puso el equipo de Estados Unidos en el relevo de femenino de 4x200 estilo libre, en el que Jessica Rodríguez, Emily Kukors, Ava Ohlgren y Katie Carrol hicieron 8:02.03 minutos para establecer una nueva marca panamericana.
Lo especial es que las estadounidenses se superaron a si mismas, pues sólo en la sesión vespertina de este martes, cuando se disputaron las semifinales, habían dejado el récord en 8:05.28.
Los representantes de Estados Unidos capturaron un total de ocho medallas, tres de oro, tres de plata y dos de bronce, mientras los nadadores del país anfitrión de estos Juegos ganaron también tres de oro, además de una de plata y otra de bronce, para un total de cinco.
Canadá, con una medalla de cada metal, marcó también presencia en la jornada, en la que Venezuela tuvo la satisfacción de ver a dos de sus representantes en el podio: Arlene Semeco, plata en 50 metros libres y Albert Subirats, bronce en los 100 metros mariposa.
Argentina ganó una plata con el veterano pero aún eficaz "Tiburón" José Meolans, en los 100 metros libre, carrera en la que demostró que aún posee una gran potencia, sobre todo en el segundo tramo de la carrera, en la que arremetió desde atrás para arrebatarle el segundo puesto al estadounidense Gabriel Woodward.
"Todavía no ha llegado el momento de retirarme", dijo Meolans a los periodistas en la zona mixta del centro acuático María Lenk, en declaraciones en las que añadió que los argentinos aún pueden esperar logros de su parte.
Puerto Rico ganó un bronce con sabor a desencanto de Vanessa García Vega en los 50 metros libres, modalidad en la que la deportista boricua, según admitió, se había preparado para más, incluso para el oro.
La lluvia de récords comenzó temprano en la piscina, pues ya en la primera final de la jornada, 400 metros libre masculinos, el estadounidense llevó la marca panamericana a 3:49.77 minutos, superando los 3:50.01 que el venezolano Ricardo Monasterio había establecido en los Juegos de Santo Domingo 2003.
En los 50 metros estilo libre femeninos, la brasileña Rebeca Gusmao detuvo los cronómetros en 25.05 segundos e hizo trizas la ilusión de la venezolana Arlene Semeco, que tenía el récord anterior desde ayer cuando hizo 25.14 segundos en las semifinales.
Aunque no se trataba de una final, el estadounidense Scott Clary no quiso ser menos y en las semifinales de los 200 metros espalda nadó en 1:58.78 minutos para dejar atrás la marca de 1:59.33 que el brasileño Leonardo Costa había establecido en los Juegos de Winnipeg'99.
"César tocó el Cielo", es una frase que calza perfectamente con lo ocurrido en los 100 metros estilo libre, en los que el brasileño Cèsar Cielo, la figura más aplaudida por la "torcida" instalada en las gradas, detuvo el reloj en 48.79 segundos.
Cielo superó hoy los 49.19 segundos que un compatriota suyo legendario había establecido en Winnipeg'99: Fernando Scherer, que el pasado marzo, unos meses antes de los juegos, anunció su retirada, a los 32 años, porque ya no se sentía motivado, según manifestó entonces.
La guinda de la torta la puso el equipo de Estados Unidos en el relevo de femenino de 4x200 estilo libre, en el que Jessica Rodríguez, Emily Kukors, Ava Ohlgren y Katie Carrol hicieron 8:02.03 minutos para establecer una nueva marca panamericana.
Lo especial es que las estadounidenses se superaron a si mismas, pues sólo en la sesión vespertina de este martes, cuando se disputaron las semifinales, habían dejado el récord en 8:05.28.