La anticipación de un locutor embargado por la emoción indujo a confusión a los remeros brasileños que en el despiste subsiguiente perdieron la plata para quedarse con el bronce.

La pareja brasileña de dos sin timonel formada por Allan Bittencourt y Anderson Nocetti iba en segundo lugar en dura pugna con el barco de Estados Unidos en los 500 metros finales de los 2.000 de la prueba, mientras los canadienses lideraban con gran ventaja.

Cerca de la meta, Brasil se puso por delante y su hinchada vibró de alegría. El locutor Sergio Nogueira dijo entonces por la megafonía que Brasil cruzó la meta en segundo lugar.

Los remeros aflojaron la marcha y los canadienses les adelantaron para ganar la plata. El locutor, sin nombrar el tercero, corrigió después afirmando que la plata dependería de la "fotofinish".

Segundos más tarde, el marcador electrónico mostró que, por 27 centésimas de segundo, la plata había sido ganada por los canadienses Daniel Beerry y Patrick O'Dunne.

Bittencourt quitó hierro a la equivocación del locutor y dijo que la responsabilidad de lo que ocurrió en la prueba era de ellos, mientras su compañero, Nocetti, lamentó el error de Sergio Nogueira.