Bolivianos piden en Sao Paulo ayuda a Pelé contra veto de la FIFA a la altura
Al menos 200 bolivianos residentes en Sao Paulo pidieron con arengas y carteles ayudas al ex futbolista Pelé en una campaña para que la FIFA levante su veto a los partidos internacionales programados en ciudades localizadas a más de 2.500 metros de altura.
Los manifestantes, liderados por el cónsul de ese país en Sao Paulo, Jaime Almanza, se agruparon en un trecho de la Avenida Paulista, donde está localizado el corazón financiero de la ciudad.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, se ha puesto al frente de una campaña contra la decisión adoptada el 28 de mayo pasado por el Comité Ejecutivo de la Federación Internacional de Asociaciones de Fútbol (FIFA).
"Por razones médicas y para proteger la salud de los jugadores, el Ejecutivo resolvió que, en el futuro, no se deberá disputar partidos internacionales a una altura superior a los 2.500 metros", subrayó la FIFA en un comunicado divulgado ese día.
Las pancartas exhibidas hoy calificaban la decisión de la FIFA como un "apartheid deportivo". "Pedimos al rey Pelé su apoyo", reclamaban otras.
"Hacemos esta manifestación pacífica porque no estamos de acuerdo con esa discriminación que Bolivia está sufriendo. Jugamos al nivel del mar, a casi 40 grados centígrados. ¿Por qué no pueden jugar a más de 2.500 metros?", cuestionó Almanza.
En Sudamérica las selecciones de Bolivia, Colombia y Ecuador son las más perjudicadas con el veto de la FIFA a la altura, ya que La Paz, Bogotá y Quito, tradicionales sedes, están localizadas a más de 2.500 metros sobre el nivel del mar.
Bogotá está a 2.649 metros, La Paz a 3.600 metros y Quito a 2.850 metros.
Además, Perú quiso incluir como sede para las eliminatorias del Mundial 2010 la ciudad de Cuzco, a 3.400 metros sobre el nivel del mar.
Los manifestantes, liderados por el cónsul de ese país en Sao Paulo, Jaime Almanza, se agruparon en un trecho de la Avenida Paulista, donde está localizado el corazón financiero de la ciudad.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, se ha puesto al frente de una campaña contra la decisión adoptada el 28 de mayo pasado por el Comité Ejecutivo de la Federación Internacional de Asociaciones de Fútbol (FIFA).
"Por razones médicas y para proteger la salud de los jugadores, el Ejecutivo resolvió que, en el futuro, no se deberá disputar partidos internacionales a una altura superior a los 2.500 metros", subrayó la FIFA en un comunicado divulgado ese día.
Las pancartas exhibidas hoy calificaban la decisión de la FIFA como un "apartheid deportivo". "Pedimos al rey Pelé su apoyo", reclamaban otras.
"Hacemos esta manifestación pacífica porque no estamos de acuerdo con esa discriminación que Bolivia está sufriendo. Jugamos al nivel del mar, a casi 40 grados centígrados. ¿Por qué no pueden jugar a más de 2.500 metros?", cuestionó Almanza.
En Sudamérica las selecciones de Bolivia, Colombia y Ecuador son las más perjudicadas con el veto de la FIFA a la altura, ya que La Paz, Bogotá y Quito, tradicionales sedes, están localizadas a más de 2.500 metros sobre el nivel del mar.
Bogotá está a 2.649 metros, La Paz a 3.600 metros y Quito a 2.850 metros.
Además, Perú quiso incluir como sede para las eliminatorias del Mundial 2010 la ciudad de Cuzco, a 3.400 metros sobre el nivel del mar.