Río 2007: Las camas no resisten los 108 kilos de Schlitter.
El judoca brasileño del peso pesado Joao Gabriel Schilitter no tiene cama en la Villa Panamericana que se le resista.
Nada menos que tres camas han roto sus 108 kilogramos de peso, ocasiones en las que se ha visto obligado a dormir sobre colchones en el suelo.
Me acuesto en las camas y se rompen, dijo Schlitter al diario Folha de Sao Paulo.
Schlitter, de 22 años, 108 kilos de peso y 1,98 metros de estatura, rompió su primera cama media hora después de acostarse. Me dí la vuelta y se rompió, dijo.
Como había otro lecho en su cuarto, se acostó en él y también se hundió. Recurrió entonces a la cama de reserva y le pasó lo mismo.
Según Folha, parece ser que los somieres de la Villa son demasiado frágiles porque también otros deportistas, como el waterpolista Luís Maurício Santos (1,90 metros) y la voleibolista Regiane (1,90), han tenido que dormir en el suelo después de llevarse un batacazo.