Federer: En tierra, siento que Nadal está en el asiento del conductor
El suizo Roger Federer, finalista de Wimbledon junto con el español Rafael Nadal, comentó hoy que en sus enfrentamientos en tierra con el balear tenía la sensación de que el número dos "está siempre en el asiento del conductor", un situación que se invierte, dijo, cuando se miden en hierba.
Ambos jugadores se verán en la final masculina de Wimbledon mañana, domingo, tras haber derrotado el helvético al francés Richard Gasquet y después de la retirada del serbio Novak Djokovic de su partido en la pista 1 contra Nadal.
"La sensación es parecida cada vez que jugamos juntos. Es como nos pasa en Roland Garros, cuando jugamos en las finales. Tienes la misma sensación", explicó hoy Federer.
El número uno del mundo indicó, sin embargo, que la forma en la que ambos se habían metido en la final había sido "totalmente diferente".
"El año pasado jugué de forma increíble durante todo el torneo, no cedí un solo set, y tuve un cuadro increíblemente duro. Jugué contra Nadal y llegué con muchísima confianza", dijo.
Este año, añadió, "es parecido". "He jugado bien. Pero quizá he dominado menos que el año pasado. Aunque aún me siento bien y me he dado a mí mismo la oportunidad de ganar el torneo otra vez".
A la hora de describir sus tácticas en la cancha, así como las de Nadal, Federer apuntó que ambos eran "muy consistentes, en primer lugar, física y mentalmente, somos muy duros y además, tenemos un juego muy sólido. No permitimos que nos sucedan muchos contratiempos cuando jugamos".
Acerca de la forma física del mallorquín para esta segunda final consecutiva en Wimbledon, Federer observó que Nadal había tenido "un par de sustos".
"Podría haber perdido dos partidos y los resolvió. Así que al final -dijo-, parece que ha jugado otra vez de forma increíble. Pero creo que ha tenido algunos problemas".
"No sé si está jugando mucho mejor. El cuadro ha sido, esta vez, diferente para él -añadió el primer favorito-, pero es un jugador duro, como siempre, consistente. Yo aposté por él y se merece totalmente volver a estar en la final".
Federer reconoció que no sabía "el tipo de enfoque" con el que el manacorense saltará mañana a la cancha. "Sé que yo tengo que jugar agresivo, sacar bien, jugar el juego de hierba que yo puedo jugar. Ojalá esto sea suficiente".
En la final de mañana, estará en las gradas el ex tenista sueco Bjorn Borg, cuyo récord de cinco Wimbledon consecutivos aspira a igualar Federer.
El suizo admitió que para él sería "increíble, alucinante lograr este objetivo porque nunca, jamás, -dijo- y creo que fue lo mismo para él, pensé que ganaría Wimbledon tantas veces".
"Ahora estoy en situación de igualar este gran récord. Hoy le he visto por aquí y gracias a dios que lo vi cuando iba por el segundo set y que me pude concentrar en el primero", dijo.
Sobre la presencia de Borg en el palco de la Central, el helvético comentó que se trataba de un "aliciente" por ser el sueco una "leyenda vida" y por todo "el respeto" que siente hacia él.
Por otro lado, aunque tener a Borg de espectador "es un aliciente, puede ser algo negativo si te poner mucha presión. Al final tienes que olvidarte de quién te está viendo".
Ambos jugadores se verán en la final masculina de Wimbledon mañana, domingo, tras haber derrotado el helvético al francés Richard Gasquet y después de la retirada del serbio Novak Djokovic de su partido en la pista 1 contra Nadal.
"La sensación es parecida cada vez que jugamos juntos. Es como nos pasa en Roland Garros, cuando jugamos en las finales. Tienes la misma sensación", explicó hoy Federer.
El número uno del mundo indicó, sin embargo, que la forma en la que ambos se habían metido en la final había sido "totalmente diferente".
"El año pasado jugué de forma increíble durante todo el torneo, no cedí un solo set, y tuve un cuadro increíblemente duro. Jugué contra Nadal y llegué con muchísima confianza", dijo.
Este año, añadió, "es parecido". "He jugado bien. Pero quizá he dominado menos que el año pasado. Aunque aún me siento bien y me he dado a mí mismo la oportunidad de ganar el torneo otra vez".
A la hora de describir sus tácticas en la cancha, así como las de Nadal, Federer apuntó que ambos eran "muy consistentes, en primer lugar, física y mentalmente, somos muy duros y además, tenemos un juego muy sólido. No permitimos que nos sucedan muchos contratiempos cuando jugamos".
Acerca de la forma física del mallorquín para esta segunda final consecutiva en Wimbledon, Federer observó que Nadal había tenido "un par de sustos".
"Podría haber perdido dos partidos y los resolvió. Así que al final -dijo-, parece que ha jugado otra vez de forma increíble. Pero creo que ha tenido algunos problemas".
"No sé si está jugando mucho mejor. El cuadro ha sido, esta vez, diferente para él -añadió el primer favorito-, pero es un jugador duro, como siempre, consistente. Yo aposté por él y se merece totalmente volver a estar en la final".
Federer reconoció que no sabía "el tipo de enfoque" con el que el manacorense saltará mañana a la cancha. "Sé que yo tengo que jugar agresivo, sacar bien, jugar el juego de hierba que yo puedo jugar. Ojalá esto sea suficiente".
En la final de mañana, estará en las gradas el ex tenista sueco Bjorn Borg, cuyo récord de cinco Wimbledon consecutivos aspira a igualar Federer.
El suizo admitió que para él sería "increíble, alucinante lograr este objetivo porque nunca, jamás, -dijo- y creo que fue lo mismo para él, pensé que ganaría Wimbledon tantas veces".
"Ahora estoy en situación de igualar este gran récord. Hoy le he visto por aquí y gracias a dios que lo vi cuando iba por el segundo set y que me pude concentrar en el primero", dijo.
Sobre la presencia de Borg en el palco de la Central, el helvético comentó que se trataba de un "aliciente" por ser el sueco una "leyenda vida" y por todo "el respeto" que siente hacia él.
Por otro lado, aunque tener a Borg de espectador "es un aliciente, puede ser algo negativo si te poner mucha presión. Al final tienes que olvidarte de quién te está viendo".