Samaranch es el español más conocido en China.
Xiaoqi Qiu, embajador de China en España, calificó a los Juegos Olímpicos que se celebrarán en Pekín en 2008 como el "motor del cambio" en su país, y aseguró que Juan Antonio Samaranch, "El 'Abuelo Sa' como le conoce la gente, es el español más conocido en China".
En su exposición inicial, en el transcurso de una conferencia-debate que se celebró en el Foro Fundación Ferrándiz-As, Qiu ponderó los grandes esfuerzos que está haciendo el Comité Organizador para lograr "unos de los mejores Juegos de la historia", en los que primen "la apertura, la innovación, la austeridad, la limpieza y la participación del pueblo chino".
Tras calificar a los Juegos como "un gran motor para cambiar China" y que Pekín "estará preparada para recibir y acoger muy bien a todos sus visitantes", el embajador de China en España alabó la figura de Juan Antonio Samaranch al que calificó de español más universal y conocido en su país.
"Samaranch es conocido por todos los chinos, que le llaman cariñosamente 'Abuelo Sa'. Es el español más universal en mi país y no necesita ninguna tarjeta de presentación", dijo.
Respecto a aspectos más deportivos, el embajador reconoció que su país es "la primera potencia mundial en tenis de mesa", aunque también les interesaba "mucho el fútbol, pese al bajo nivel, y el baloncesto, la gimnasia o el atletismo", en donde ya tienen "un nivel bastante fuerte".
Qiu también garantizó "la libertad de prensa durante los Juegos y las condiciones idóneas para el desarrollo de su actividad a periodistas y atletas de todos el mundo".
El embajador chino reconoció que tenían problemas de medio ambiente y de contaminación en la capital, en Pekín. "Estamos haciendo un gran trabajo en este sentido, pero en los últimos años y debido a nuestro gran desarrollo, cada vez hay más coches en las calles y eso hablando de una ciudad con más de 15 millones de habitantes son palabras mayores", apuntó.
Sobre las costumbres del país, las medidas a tomar han sido drásticas.
"También estamos haciendo un gran trabajo para desterrar viejas costumbres entre la ciudadanía y ya se están imponiendo multas muy serías para los que violan este reglamento. Se está multando con cinco euros a los que hacen esto. Los chinos vamos a conseguir un mejor comportamiento ético y moral", finalizó Xiaoqi Qiu.
En su exposición inicial, en el transcurso de una conferencia-debate que se celebró en el Foro Fundación Ferrándiz-As, Qiu ponderó los grandes esfuerzos que está haciendo el Comité Organizador para lograr "unos de los mejores Juegos de la historia", en los que primen "la apertura, la innovación, la austeridad, la limpieza y la participación del pueblo chino".
Tras calificar a los Juegos como "un gran motor para cambiar China" y que Pekín "estará preparada para recibir y acoger muy bien a todos sus visitantes", el embajador de China en España alabó la figura de Juan Antonio Samaranch al que calificó de español más universal y conocido en su país.
"Samaranch es conocido por todos los chinos, que le llaman cariñosamente 'Abuelo Sa'. Es el español más universal en mi país y no necesita ninguna tarjeta de presentación", dijo.
Respecto a aspectos más deportivos, el embajador reconoció que su país es "la primera potencia mundial en tenis de mesa", aunque también les interesaba "mucho el fútbol, pese al bajo nivel, y el baloncesto, la gimnasia o el atletismo", en donde ya tienen "un nivel bastante fuerte".
Qiu también garantizó "la libertad de prensa durante los Juegos y las condiciones idóneas para el desarrollo de su actividad a periodistas y atletas de todos el mundo".
El embajador chino reconoció que tenían problemas de medio ambiente y de contaminación en la capital, en Pekín. "Estamos haciendo un gran trabajo en este sentido, pero en los últimos años y debido a nuestro gran desarrollo, cada vez hay más coches en las calles y eso hablando de una ciudad con más de 15 millones de habitantes son palabras mayores", apuntó.
Sobre las costumbres del país, las medidas a tomar han sido drásticas.
"También estamos haciendo un gran trabajo para desterrar viejas costumbres entre la ciudadanía y ya se están imponiendo multas muy serías para los que violan este reglamento. Se está multando con cinco euros a los que hacen esto. Los chinos vamos a conseguir un mejor comportamiento ético y moral", finalizó Xiaoqi Qiu.