El técnico del Barcelona, Frank Rijkaard, admite la trascendencia del clásico tras la eliminación de su equipo de la Liga de Campeones y de actuar mañana en casa, pero aboga por convertir "la palabra presión en motivación".

Rijkaard considera que actuar en el Camp Nou debe darle "coraje" a sus jugadores y equilibra el tropiezo de los suyos en Europa con el sufrido por el Real Madrid en su eliminatoria frente al Bayern de Múnich, con lo que ve "a los dos conjuntos igual".

El holandés se otorga en todo caso la "ventaja de jugar en casa con la afición" y asegura que su equipo está "bien anímicamente", que trabaja de forma adecuada y que, además, disputar el clásico supone "una motivación automática".

Frank Rijkaard, quien dio opciones de título al Real Madrid aunque tropiece en el Camp Nou, evitó pronunciarse sobre una hipotética destitución de su homólogo Fabio Capello en caso de victoria azulgrana.

Rijkaard admitió su relación de amistad con Capello, al que elogió como entrenador, pero subrayó que no puede entrar en análisis sobre la actualidad de otros equipos.

El holandés, tras la última sesión previa al clásico, se centró en el partido y explicó que el brasileño Ronaldo de Assis 'Ronaldinho', duda estos días por unas molestias en los isquiotibiales, se ejercitó hoy en el entrenamiento a puerta cerrada y que está en condiciones de alinearse ante el Real Madrid.

De Samuel Eto'o, cuyo rendimiento en Liverpool ha cuestionado su actual estado de forma, explicó que mejora "cada día", algo que consideró "normal tras una lesión", situación que hizo extensiva al argentino Leo Messi.

Respecto a las declaraciones del islandés Eidur Gudjohnsen sobre la necesidad de un mayor compañerismo en el vestuario, Frank Rijkaard consideró que se refería a actitud en partidos ante rivales bien organizados como el del pasado martes, "donde hay que hacer un esfuerzo aún mayor".

Por último, Rijkaard consideró puntual la baja en las últimas convocatorias de su compatriota Giovanni van Bronckhorst, del que detalló que espera "su oportunidad", y aparcó para "otro momento" las precisiones sobre sus declaraciones recientes en las que concretaba en "tres o cuatro" el número de fichajes idóneo para la próxima temporada.