Brasil fue recibido con tímida fiesta tras conquistar la Copa América.
La selección brasileña, que este domingo conquistó el título de la Copa América con una contundente victoria por 3-0 sobre Argentina en la final, tuvo hoy una tímida recepción en el aeropuerto de Río de Janeiro, donde desembarcó en la madrugada y de sorpresa para los hinchas.
El seleccionador brasileño, Dunga, y los pocos jugadores que aterrizaron hacia las 5.00 hora local (8.00 GMT) de hoy en el aeropuerto internacional de Río de Janeiro fueron recibidos con fuertes aplausos por algunos hinchas que se encontraban en la terminal aérea a esa hora.
La al parecer inesperada victoria de la selección brasileña en la final de la Copa América tras haber sido criticada durante toda la competición, la tempranera hora de llegada a Río y el desembarco no anunciado impidieron a los hinchas preparar una fiesta más calurosa y ruidosa para recibir al equipo comandado por Dunga.
Pese a la tímida recepción, la prensa no ahorró elogios para destacar un equipo que, pese a las críticas, brilló en la victoria sobre la favorita Argentina; derrotó a los máximos rivales del país con un incontestable 3-0 y mantuvo el título de la Copa América conquistado hace tres años ante el mismo adversario.
Los pocos hinchas que estaban en el aeropuerto, sin embargo, sorprendieron a un sonriente Dunga con un ruidoso aplauso y con un asedio al que el técnico, que asumió el comando de la selección el año pasado tras el fracaso de Brasil en la Copa del Mundo de 2006, ya no estaba acostumbrado.
Este fue el primer título conquistado como seleccionador brasileño por Dunga, que, como jugador, venció la Copa del Mundo de 1994 y dos veces la Copa América.
La victoria no fue ningún tipo de respuesta, dijo el técnico al desembarcar y en referencia a las críticas que recibió durante toda la Copa América y a la poca confianza de los brasileños en una selección a la que le faltaban sus principales estrellas, entre ellos Ronaldinho Gaúcho (Barcelona español) y Kaká (Milán italiano).
Sabía que seríamos muy presionados y cobrados, principalmente después de la derrota ante México (por 2-0 en el primer partido de la competición), aseguró el entrenador.
Dunga se abstuvo de dar respuestas sobre los jugadores que piensa convocar para los partidos por las eliminatorias de la Copa de 2010 y dijo que por ahora apenas quiere conmemorar el título alcanzado en Venezuela.
Las declaraciones de los futbolistas en su desembarque en Río de Janeiro también tuvieron como factor común una respuesta a las críticas que recibieron durante la Copa América.
Muchas personas dijeron que no teníamos capacidad, que esta selección era la peor en todos los tiempos. Y conseguimos superar todo y callarle la boca a muchos, entre ellos a algunos que entienden de fútbol y otros que no entienden nada, afirmó el volante Josué.
El jugador aseguró que muchos periodistas exageraron con sus críticas y ofensas al equipo.
Brasil mostró que tiene condiciones de conquistar títulos con jugadores nuevos, agregó el centrocampista Elano.
Tanto Josué y Elano como Julio Baptista, entre los criticados al comienzo, se destacaron en la final y garantizaron un cupo como titulares de Brasil.
La pregunta que comienza a hacerse hoy la presa deportiva brasileña es si mantendrán ese cupo durante las eliminatorias, ya que Dunga ahora podrá llamar a los jugadores que no quisieron disputar la Copa América, como Kaká y Ronaldinho, o a los que estaban lesionados, como Adriano, Lucio y Julio César.
Lo más positivo para mí es que tuve una oportunidad y supe aprovecharla de la mejor forma. Espero participar bien en caso de que sea convocado de nuevo, afirmó Julio Baptista.
En sus primeras declaraciones, Dunga dijo que, los que aceptaron ir a la Copa América e hicieron un buen trabajo, están ahora al frente de los otros. No puedo sacarlos del equipo ahora, dijo.