Sueño de Venezuela en su propio torneo concluyó en los cuartos de final

Enviado por bielo el Dom, 08/07/2007 - 18:32
El sueño de Venezuela, la anfitriona de la Copa América, se esfumó en la fase de cuartos de final, con una inesperada derrota de 1-4 ante Uruguay, para despedirse con su labor cumplida pero con un sabor agridulce.

Los venezolanos comenzaron con muchas dudas el torneo después que Bolivia le complicase al terminar empatados 2-2, con lo generó reacciones diversas de preocupación de parte de la prensa y de los propios aficionados.

Con varios ajustes de parte del técnico Richard Páez, la "vinotinto" se encontró con su segunda victoria en la Copa después de cuarenta años gracias a un triunfo de 2-0 contra Perú.

Pese a los goles de Cichero y Arismendi, la expulsión del peruano Pedro García apenas a los 14 minutos cambió notablemente la dirección del encuentro, que finalmente se decantó para los locales, que ganaron con más corazón que fútbol.

El cierre de la primera fase en Mérida, con un empate sin goles ante los uruguayos, en un partido de guante blanco, mostró algunas deficiencias de Venezuela en el centro del campo, que terminó de explotar este sábado en San Cristóbal.

Uruguay, que no había aparecido hasta anoche, superó física y tácticamente a una Venezuela con pocas ideas en la creación y que fue superado en largos pasajes del encuentro.

La realidad cayó en los jugadores locales, que siempre confiaron en seguir adelante en el torneo, pero su capacidad no fue suficiente para doblegar el orgullo herido de los celestes.

A nivel individual, el centrocampista del Mallorca, Juan Arango, quedó en deuda con sus aficionados ya que apenas en el último partido enseñó parte de su repertorio con un bonito gol de tiro libre, que, sin embargo, no fue suficiente para disparar la chispa que encendiese la ofensiva de los anfitriones.

Otro que sobresalió fue el centrocampista Miguel Mea Vitali, el más regular en todo el torneo, que puede ser una de las piezas con las que cuenta Richard Páez para las próximas eliminatorias.

También hubo buenos momentos para Ricardo David Páez, que terminó muy apagado ayer y fue el único expulsado de su selección, así como el defensor Cichero, autor de un gol de cabeza ante los peruanos.

Se esperaba más de los jóvenes jugadores como Alejandro Guerra y del propio delantero Fernando De Ornelas, que no tuvo claridad para superar a los defensores rivales en los cuatro encuentros y de Daniel "Cafú" Arismendi, que tuvo su gran oportunidad al anotar el gol de cierre con Perú, pero que no lució en el segundo tiempo este sábado.

El propio técnico Páez reconoció que Venezuela "no estuvo en su nivel" que quiso recuperar mientras transcurría la Copa América, pero finalmente no tuvo el aplomo necesario para seguir en carrera.

Según Páez, el estado físico fue clave en el cierre ante Uruguay, a solo dos meses de comenzar las eliminatorias para el mundial de 2010.

"Ha sido un aprendizaje positivo que nos deja reconocer el nivel de nuestros jugadores con la diferencia en la parte física. Tenemos que sacarnos el sombrero con estos jugadores, con limitaciones hemos logrado transcender porque Venezuela soñó con este partido y fue una buena lección antes de las eliminatorias", ratificó.

De todas maneras, la historia de la "vinotinto" cambió notablemente al terminar por primera vez líder en una fase de grupos con cinco puntos e invicto, con su primera clasificación hasta los cuartos de final.

Ahora, Venezuela, que ve de lejos la semana final de la Copa América, apunta a las próximas eliminatorias, donde varias de sus figuras ya comenzarán a despedirse, por lo que un recambio en varias posiciones claves deberá encontrar el técnico Páez