Estados Unidos cierra su tercera participación con tres derrotas
La selección de Estados Unidos cerró su tercera participación en la Copa América, después de también ser invitada en las ediciones de 1993 y 1995, con una pobre actuación que le ha hecho encajar tres derrotas y acabar última del Grupo C.
Estados Unidos, que se presentó en Venezuela 07 con unas estadísticas en esta competición de nueve partidos, con dos victorias, dos empates y cinco derrotas, deja hoy la ciudad de Barquisimeto después de que anoche volviera a perder (1-0) ante Colombia, como ya lo hizo en Maracaibo ante Argentina (4-1) y en Barinas frente a Chile (3-1).
Los ocho goles en contra y sólo dos a favor, uno de ellos de penalti, es un claro dato para describir la pobre impresión que causó el equipo que presentó el técnico Bob Bradley.
El entrenador estadounidense se trajo una convocatoria muy diferente a la que ha utilizado para ganar recientemente una nueva edición de la Copa Oro, tras imponerse en la final de Chicago a México por 2-1.
Bradley no incluyó en la lista a sus estrellas, como el delantero Landon Donovan, el volante zurdo DaMarcos Beasley, el defensa Carlos Bocanegra, el centrocampista Clint Dempsey o el portero Tim Howard.
Sólo el defensa Jonathan Bornstein, los centrocampistas Benny Feilhaber y Ricardo Clark y el delantero Taylor Twellman son los que siguen en la selección tras el reciente éxito del torneo que organiza la Concacaf.
El evidente aumento del nivel futbolístico de Estados Unidos en los últimos tiempos y el buen hacer de su experimentado entrenador dejaba algo de incertidumbre en el rendimiento que podría desarrollar esta selección, pero el equipo, con muchos juveniles, no ha podio ante selecciones mucho más hechas.
Bradley argumentó que los futbolistas elegidos eran consecuencia de que la Liga en Estados Unidos no se había interrumpido por la Copa América y que, después de la Copa Oro, los clubes norteamericanos habían puesto problemas para volver a ceder a sus jugadores.
Pese a ello, el técnico reiteró que la selección que se formó para Venezuela era de garantías para desarrollar un papel digno, algo que a la postre no se ha demostrado.
Estados Unidos, que se presentó en Venezuela 07 con unas estadísticas en esta competición de nueve partidos, con dos victorias, dos empates y cinco derrotas, deja hoy la ciudad de Barquisimeto después de que anoche volviera a perder (1-0) ante Colombia, como ya lo hizo en Maracaibo ante Argentina (4-1) y en Barinas frente a Chile (3-1).
Los ocho goles en contra y sólo dos a favor, uno de ellos de penalti, es un claro dato para describir la pobre impresión que causó el equipo que presentó el técnico Bob Bradley.
El entrenador estadounidense se trajo una convocatoria muy diferente a la que ha utilizado para ganar recientemente una nueva edición de la Copa Oro, tras imponerse en la final de Chicago a México por 2-1.
Bradley no incluyó en la lista a sus estrellas, como el delantero Landon Donovan, el volante zurdo DaMarcos Beasley, el defensa Carlos Bocanegra, el centrocampista Clint Dempsey o el portero Tim Howard.
Sólo el defensa Jonathan Bornstein, los centrocampistas Benny Feilhaber y Ricardo Clark y el delantero Taylor Twellman son los que siguen en la selección tras el reciente éxito del torneo que organiza la Concacaf.
El evidente aumento del nivel futbolístico de Estados Unidos en los últimos tiempos y el buen hacer de su experimentado entrenador dejaba algo de incertidumbre en el rendimiento que podría desarrollar esta selección, pero el equipo, con muchos juveniles, no ha podio ante selecciones mucho más hechas.
Bradley argumentó que los futbolistas elegidos eran consecuencia de que la Liga en Estados Unidos no se había interrumpido por la Copa América y que, después de la Copa Oro, los clubes norteamericanos habían puesto problemas para volver a ceder a sus jugadores.
Pese a ello, el técnico reiteró que la selección que se formó para Venezuela era de garantías para desarrollar un papel digno, algo que a la postre no se ha demostrado.