A Fernando Alonso, que ha batido casi todos los récords de juventud desde que comenzó a competir con Renault en la Fórmula Uno, incluido el del campeón del mundo más joven, le toca ganar ya en su Gran Premio, el de España, que se disputará éste fin de semana en el circuito de Catalunya.

Hasta ahora ha finalizado en dos ocasiones en el segundo puesto, en 2005 y 2003, y fue cuarto en 2004, en las veces en que ha contado con un coche competitivo, porque con el Minardi, en 2001, fue decimotercero. Este año le toca ganar.

Alonso, que encabeza el mundial de la presente temporada con 44 puntos, 13 más que el alemán Michael Schumacher (Ferrari), ha logrado ya batir su primera marca y es que el domingo el trazado barcelonés registrará una cifra récord de espectadores de 130.000 y a lo largo del fin de semana serán 330000 los que acudan a apoyar al asturiano.

La alonsomanía continúa imparable y a pesar que este año se han ampliado las tribunas en 12000 localidades, desde hace un par de meses se colgó el cartel de no hay entradas para presenciar, según se adivina tras los últimos Grandes Premios, un nuevo duelo entre Fernando Alonso y Michael Schumacher.

Ferrari y sus neumáticos Bridgestone parecen estar fuertes, pero queda por ver si con las temperaturas más altas de Barcelona tienen el mismo comportamiento que la semana pasada en Nurburgring, en el que fueron inalcanzables, y aquí Fernando Alonso tiene más posibilidades de la luchar y conseguir la victoria.

El año pasado el Gran Premio de España marcó el resurgir de Mclaren-Mercedes con la victoria de Kimi Raikkonen por delante de Alonso. Este año puede ocurrir algo similar después de la floja actuación de las flechas de plata en el Gran Premio de Europa del domingo pasado y la lucha que se presume entre Fernando Alonso y Michael Schumacher puede ser arbitrada por el finlandés.

Con tan solo una semana de diferencia entre la carrera de Nurburgring y la de España, los coches no presentan ninguna novedad aerodinámica y algunos, como Fernando Alonso, deberán utilizar el motor que ya emplearon la semana pasada, aunque eso es algo que no preocupa al asturiano.

El circuito de Catalunya es uno de los más empleados durante el invierno para hacer pruebas por los equipos de Fórmula Uno y poner a punto sus coches y las sorpresas suelen ser muy pequeñas en este Gran Premio, ya que se llega con las máquinas perfectamente a punto y eso perjudica también el espectáculo, ya que los pilotos rodarán menos de lo habitual, sobre todo los que tienen que utilizar el motor por segunda vez.

El francés Frank Montagny correrá su segunda carrera con la escudería Super Aguri y seguramente seguirá con ellos el resto de la temporada, ya que ayer la Federación Internacional del Automóvil (FIA) retiró la súper licencia al japonés Yuji Ide.

Mañana la jornada estará dedicada a los entrenamientos libres y el sábado, tras una nueva sesión libre, se disputará la sesión de clasificación, cuyo resultado será muy importante para la carrera del domingo.