Ecuador terminó con una derrota su participación en Eliminatorias y quedó fuera de Sudáfrica
Ecuador jugó hoy, en Santiago, el último partido de las Eliminatorias Sudamericanas rumbo a Sudáfrica 2010, y se jugó también la última oportunidad de acceder a la repesca. La tricolor saltó con su característica casaca amarilla, pero por reglamento, para no confundirse con su rival, debió vestir pantaloneta de color blanco.
El encargado de impartir justicia en el partido fue el paraguayo Carlos Torres, acompañado en las líneas por sus compatriotas Milciades Saldívar y César Branco. El escenario de la contienda fue un Estadio Monumental repleto.
Los dirigidos por Vizuete presentaron a: Marcelo Elizaga; Néicer Reasco, Jorge Guagua, Iván Hurtado, Walter Ayoví; Christian Lara, Edison Méndez, Segundo Alejandro Castillo, Fernando Hidalgo, Jefferson Montero; y en punta Christian Benítez.
Por su parte Marcelo Bielsa puso a: Claudio Bravo; Gary Medel, Waldo Ponce, Roberto Cereceda; Arturo Vidal, Manuel Iturra, Rodrigo Millar, Jorge Valdivia; Alexis Sánchez, Jean Beausejour y Humberto Suazo.
Los primeros minutos fueron de vértigo de los chilenos, denunciando su actitud de salir a buscar una victoria para cerrar unas eliminatorias brillantes, ya clasificados, con un triunfo en su casa.
A los cinco minutos Chile tuvo una gran ocasión de marcar, tras el cobro del primer tiro de esquina del partido, después de un toque atrás salió un centro al corazón del área que encontró la cabeza de Gary Medel, el volante de Boca remató fuerte al piso y Elizaga se encontró con la pelota en el centro del arco y la contuvo en dos tiempos.
Por unos momentos Ecuador seanimó a tibios ataques, principalmente por el costado derecho donde se encontraba Lara, el que se acercaba al volante de Liga era su compañero albo Edison Méndez, y trataban de hacer una pared y poner un pase largo. De ese modo Lara llegó a levantar su primer centro, pero fue contenido con facilidad por Waldo Ponce.
A los diez minutos Chile estuvo cerca de anotar nuevamente tras un pase largo al que llegaba solo Arturo Vidal, pero Elizaga salió correctamente y le quitó el balón de los pies, sin embargo el balón le quedó a Suazo, el goleador levantó la mirada y al ver la cabaña cubierta solamente por un zaguero ecuatoriano, trató de colocarla a un costado alto pero su remate se perdió ancho.
A los trece nuevamente Chile se acercó por la derecha, esta vez el centro lo cabeceó Jean Beausejour pero Iván Hurtado lanzándose al aire logró desviar la pelota al lanzamiento de esquina.
Cinco minutos después, el mismo Beausejour recibió una pase por el centro del campo, y otra vez, Marcelo Elizaga, salió con todo en busca de la pelota. Beausejour trató de levantarla sobre Elizaga pero el balón pegó en el cuerpo del portero y quedó muerto en el centro del área, Elizaga se lanzó al piso para atraparlo. Tanto el portero como el delantero quedaron golpeados y se interrumpió el juego por un par de minutos.
A los veintidós en un ataque chileno Castillo se vio obligado a barrerse para evitar el avance de Valdivia y le cometió una falta al volante chileno que le valió la primera amarilla del partido por parte de Torres.
De ese tiro libre llegó una pelota al centro del área tricolor que no pudieron despejar los centrales y por unos segundos que parecieron una hora, la pelota se paseó por el área de Ecuador antes de perderse por la línea final.
A los veintiséis llegó un ataque de Chile por izquierda, una vez más buscaron hacia el centro y econtraron a Humberto Suazo, quien se acomodó hacia la derecha y sacó un remate alto, Elizaga solo hizo vista mientras el balón se perdió ligeramente sobre el horizontal de su portería.
A los veintiocho llegó la que era hasta ese momento la jugada más peligrosa de Ecuador. Jefferson Montero peleó y ganí una pelota por la derecha en la salida chilena, llegó a la línea de fondo y sacó un centro atrás que Bravo contuvo con esfuerzo al borde del área chica tras lanzarse al piso.
Marcelo Bielsa se vio obligado a realizar una variante, pues Jean Beausejour no pudo continuar tras el encontronazo con Elizaga, y quien lo reemplazó fue Esteban Paredes. Acto seguido, Medel recibió una amarilla tras cometer una falta a Benítez que cada vez más se insinuaba por izquierda.
En estos minutos ya se veía un Ecuador más aplomado, la rapidez del juego chileno se fue diluyendo y la tricolor se animaba a controlar más la pelota desde el medio sector. Como resultado, Benítez recibía balones más cerca de la media luna y podía generar mayor peligro con sus ataques. Justamente a los treinta y cuatro el "chucho" recibió un balón, hizo una gambeta hacia la izquierda al área roja y sacó un remate rasante, de zurda, que Bravo contuvo lanzándose al piso.
A los treinta y siete "el patrón" Jorge Guagua, por salir a buscar una pelota casi hasta la media cancha, cometió una falta que le valió una cartulina amarilla del juez paraguayo.
Estos fueron los mejores minutos de Ecuador, el equipo ya no estaba parado en su campo sino que ocupaba tres cuartos de cancha, y Walter Ayoví se animó a llegar cada vez más por el andarivel izquierdo. Precisamente tras tres toques precisos de Lara, Méndez y Ayoví, fue este último el que apareció casi en la línea de fondo, amagó a sacar el centro y gambeteó hacia adentro para sacarse la marca de Iturra, y sacó un centro de derecha al corazón del área chica que Ponce despejó con apuro.
A los cuarenta y dos fue Lara quien ingresó por el mismo costado, y recibió una falta al borde de la esquina de las dieciocho. Desafortunadamente el buen centro de Méndez al área chica se encontró con los puños de Bravo, quien alejó el peligro.
Torres ya había anunciado que se jugaría un minuto de adición cuando en una jugada rapidísima, el Quinito tocó un balón de primera para Montero, el del Villarreal tocó también de primera hacia el centro haciendo la pared con Méndez, y el internacionl ecuatoriano remató de primera, casi al borde del área, buscando el segundo palo de Claudio Bravo. El balón ya había sobrado al portero chileno y se perdió, rozando el vertical, cuando en la banca ecuatoriana ya se celebraba la conquista.
El tiempo no dio para más, y los equipos se retiraron sin goles a los camerinos, mientras en Montevideo, algunos segundos después, también terminaba la primera mitad con idéntico marcador entre uruguayos y argentinos.
Para el inicio de la segunda mitad ningún técnico realizó cambios. En un inicio Chile trató otra vez de imponer su juego rápido, sin embargo la tricolor se veía igual de aplomada que al final del primer tiempo.
Antes de los tres minutos, en una pelota que Suazo peleó en el centro del campo con Lara, el chileno cometió una fuerte falta y se hizo acreedor a una tarjeta amarilla.
Un par de minutos después Ecuador atacaba por derecha, Benítez e Hidalgo tocaron entre sí y el "chucho" con prepotencia ganó la pelota, se la cedió a Méndez y el Quinito abrió al otro costado donde apareció Lara. El diablito hizo un amague hacia adentro y su remate se perdió muy desviado.
A los siete minutos Chile creó un ataque desde la izquierda, tras algunos pases sucesivos el balón llegó al costado derecho, ya casi en área ecuatoriana, y Arturo Vidal metió un pase bajo al centro del área que Millar no pudo controlar, pero que le quedó servido a Suazo, quien sin pensarlo sacó un remate, casi de la esquina del área chica, y consiguió el primer gol del partido ante el cierre de Elizaga.
Ecuador sintió el golpe, y a minuto seguido, tras una pared por derecha, Montero recibió en el área, se acomodó y sacó un remate fuerte que Cereceda envió al corner tirándose al piso.
A los trece minutos Vizuete realizó una variante, envió al campo de juego al delantero de Emelec, Joao Rojas, y sacó de la contienda a Christian Lara.
Dos minutos más tarde Chile llegó otra vez por el centro, un pase preciso de Valdivia llegó a pies de Paredes, su remate bajo se encontró otra vez con la figura enorme de un Elizaga que volvió a salvar su arco.
A los diecisiete, cuando Ecuador ya se había volcado decididamente al ataque, en un contragolpe chileno por izquierda, los delanteros volvieron a buscar hacia el centro de la cancha donde apareció Valdivia, el volante chileno levantó la mirada y trató de ubicar en una esquina alta, mas Elizaga en espectacular volada envió el balón al corner.
A los veinte Bielsa quemó otra variante al ingresar a Gonzalo Jara en sustitución de Arturo Vidal.
Todo Ecuador buscaba el empate, por derecha e izquierda, la más clara se produjo a los veinticuatro cuando tras mover el balón por todo el frente de ataque, el balón llegó a pies de Segundo Alejandro Castillo, el del Wolverhampton sacó un remate de zurda que se iba a la esquina superior izquierda de Bravo, pero el arquero, a mano cambiada, logró enviar el balón al tiro de esquina.
A los veintinueve otro contragolpe de Chile, y otra vez tras sucesivos toques buscaron por el centro, esta vez el que salvó el gol chileno fue Fernando Hidalgo, cuando Suazo tenía todo el arco para definir.
A los treinta Vizuete se jugó su última carta, envió a la cancha a Edmundo Zura y sacó del partido a un extenuado Edison Mëndez, casi al mismo tiempo Bielsa reemplazó a Cereceda con Ismael Fuentes.
A los treinta y tres se produjo una jugada del niño maravilla, Alexis Sánchez, que desde la izquierda ubicó un pase al centro a la espalda de los zagueros, el que apareció solo fue Humberto Suazo, cuando el goleador iba a sacar el remate fue desequilibrado por Ayoví, todo el estadio creyó que el juez pitaba una pena máxima pero se señaló una posición fuera de lugar de Suazo.
A los treinta y ocho, Segundo Castillo, por la vehemencia de ganar una pelota en el centro del campo que él mismo adelantó cometió una falta grosera que le valió la expulsión del partido, con lo que Ecuador jugaría los últimos minutos con diez en cancha.
Durante los minutos finales Ecuador echó lo que le quedaba, tanto emocional como físicamente, pero las piernas ya no daban para más. El partido se despidió en medio de la celebración chilena cuando toda la afición araucana flameaba banderas con la estrella solitaria en todo el estadio de Colo Colo.
Un equipo luchador cayó de pie en Chile esta noche, y la tricolor terminó una eliminatoria, que pudo ser mucho más feliz, con el trago amargo de la eliminación de la máxima cita mundialista.
¡Gracias por el esfuerzo tricolor! Será hasta Brasil el 2014.