El séptuple campeón del mundo de Fórmula Uno, el alemán Michael Schumacher, ha afirmado este viernes que el último automóvil de Ferrari, el F2008, "promete" al tiempo que descartó volver a pilotar para la escudería, aún si no pudieran hacerlo Kimmi Raikkonen o Felipe Massa.

Schumacher hizo esa declaración en una entrevista a un medio deportivo en la ciudad de Madonna del Campiglio, donde esa escudería organiza una "semana blanca" para su equipo.

El piloto explicó que el F2008 es muy prometedor, aunque precisó que "es obvio que ahora no tiene todas las piezas a punto".

También destacó que habrá que compararlo con el de los rivales "para comprender si el automóvil es bueno o no".

Sobre su participación en el equipo, dijo que su contrato está más claro este año: "Trabajaré en el desarrollo del vehículo y de la gestión deportiva".

En ese apartado, Schumacher comentó que es probable que se ponga el traje de piloto, pero sólo de pruebas, aunque añadió que lo haría "poco" y descartó por completo que él pueda volver a la competición.

Respecto al nombramiento de Stefano Domenicali como jefe de la escudería, Schumacher aseguró que "es una persona de talento y con buenas ideas para hacer crecer el equipo" y añadió que mantiene "una buena relación de trabajo". EFE