La corbata del kaiser Franz Beckenbauer, el traje de entrenador del, por entonces, seleccionador alemán Jürgen Klinsmann y otros fetiches del pasado Mundial de Alemania son algunos de los objetos que serán subastados con fines benéficos.

La organización del Mundial anunció la subasta, que se realizará a partir del 5 de agosto en seis de los doce estadios donde discurrió el torneo, entre ellos Múnich, donde se disputó el partido inaugural, y Berlín, escenario de la final.

Además de las citadas piezas de Beckenbauer, presidente del comité organizador, y de Klinsmann, se ofrecerán para la puja banderas de linier, balones, banquillos de los técnicos, así como mobiliario de las salas de prensa.

Lo que se recaude se destinará a iniciativas sociales, indicaron fuentes del comité organizador.

Entre éstas se encuentran la Fundación Franz Beckenbauer, de ayuda a discapacitados y enfermos, o a la Egidius Braun, de apoyo a la infancia.

El catálogo quedará colgado en los próximas días en internet, bajo la dirección www.dechow.de.