Ronaldo desvincula su problema del que tuvo en Francia 98.
El delantero Ronaldo afirmó hoy que no existe relación o similitud entre las náuseas y mareos que le afectaron este miércoles y la crisis que sufrió antes de la final del Mundial de Francia'98.
Nada parecido con Francia'98, dijo con firmeza un sonriente Ronaldo poco antes de manifestar que está plenamente recuperado del malestar que le obligó la víspera a someterse a exámenes.
Ronaldo Luiz Nazario de Lima, quien el 22 de septiembre cumplirá 30 años, se quejó el miércoles de una fuerte jaqueca y reiterados mareos, que hicieron necesario su traslado a una clínica de Fráncfort, a 26 kilómetros de Koenigstein, donde se concentran los brasileños.
Ronaldo presentó queja de mareo el miércoles, 14 de junio, y fue sometido a evaluación médica y exámenes complementarios no siendo constatada ninguna anormalidad. Ronaldo está, por lo tanto, en condiciones normales para el entrenamiento, dijo un escueto comunicado de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) divulgado esta madrugada.
El portavoz de la CBF, Rodrigo Paiva, habló al final de la sesión matutina de ejercicios para asegurar que el jugador del Real Madrid sintió unos mareos después del almuerzo y fue a hacerse exámenes en Fráncfort con los doctores José Luiz Runco y Serafim Borges.
No hay misterio, no hubo nada, no ocurrió nada en el vestuario, ningún problema antes del partido. El (Ronaldo) solo se quejó con el doctor ayer. Pueden quedar tranquilos, dijo el portavoz a los periodistas frente al hotel donde el equipo de Brasil está concentrado.
Antes de la última sesión del día, Ronaldo dijo ante un enjambre de periodistas que está bien y tranquilo, una vez que los exámenes clínicos practicados no constataron anomalías con su salud.
Estoy bien, más tranquilo después de que supe que no ocurrió nada de grave, apostilló.
Ronaldo explicó hoy que comenzó a sentir náuseas el miércoles, hacia las quince horas (13.00 GMT), y fue conducido por orden del doctor José Luiz Runco, a una clínica donde nada anormal fue constatado.
Ya fui medicado y ahora solo quiero pensar en el partido contra Australia, dijo Ronaldo antes de comenzar el entrenamiento.
El malestar del jugador trajo hoy de vuelta el fantasma de la final del Mundial de 1998, cuando el jugador fue ingresado de urgencia en una clínica horas del partido que Francia ganó a Brasil por 3-0.
La goleada sufrida ese día por Brasil ante Francia reveló a una selección apagada, desconocida. Y el deambular de Ronaldo en la cancha, débil, lento, con rostro pálido y mirada inexpresiva, le tornó en principio el centro de las críticas de los hinchas.
Pocos sabían que Ronaldo había tenido un disturbio mientras descansaba en la concentración y que aterrorizó a sus compañeros.
El misterio, que hasta hoy perdura, tiene diversas versiones, la más aceptada entre la prensa concluye que Ronaldo sufrió una crisis convulsiva tónico-clónica generalizada, es decir, convulsiones.
Los médicos de entonces, Lidio Toledo y Joaquim da Matta, optaron por autorizar al jugador a entrar en la cancha, después de recibir los resultados de las pruebas realizadas en una clínica de París.
No obstante, diversas versiones confirman que antes de abandonar el vestuario le fue administrado un válium, un potente calmante que habría minado aún más sus capacidades físicas.
Paiva hizo hoy alusión al episodio de la final del Mundial de 1998, en París.
El Mundial del 98 enseñó muchas cosas a todo el mundo, para la prensa y muchas personas que siguen en la selección hasta hoy y que estaban en esa época. Procuramos ahora no hacer misterio porque la noticia se filtra y puede filtrase de manera distorsionada, explicó.
Resaltó que la CBF ha sido lo más transparentes posible en este episodio al divulgar en la madrugada de hoy una nota escueta sobre lo ocurrido el miércoles.
Pudimos haberla omitido, pero decidimos publicar la información en la madrugada, para que las cosas sean claras, como debe ser, puntualizó.