Rubén Darío Insúa recalcó el desempeño de sus jugadores que sostuvieron el resultado con 10 hombres y dieron un paso gigante hacia la final del torneo. Al Quito le basta con sumar un punto ante Macará el domingo para definir el título ante el Cuenca.

El técnico Rubén Darío Insúa asistió a la rueda de prensa donde compartió su tranquilidad y las opiniones sobre cómo se desarrollo el partido.

"Tácticamente hicimos un gran partido ante un rival de jerarquía", resumió el argentino. También elogió el "espíritu de lucha" que vio en los jugadores, quienes supieron mantener el resultado con 10 hombres.

Sobre la expulsión de Michel Castro, el técnico reconoció que tuvo que cambiar su esquema y "sacrificar" a uno de sus volantes de creación, Mauricio Donoso. De igual forma, confesó que al Quito "le costó tener más llegada y Liga terminó atacando con 5 jugadores".

Pese a que los azulgranas suelen jugar prácticamente con tres delanteros en punta, la ausencia obligada por expulsión de Michael Arroyo en el partido anterior y la baja que sufrió de Castro durante el encuentro, hizo que tenga que replegarse y defender el gol de

Borghello.

El "poeta" dijo que ahora les toca pensar en el partido del domingo ante Macará a las 12h00, en el Atahualpa. Aclaró que van a buscar el "sumar 1 o 3 puntos" que les asegurarían la final ante el Cuenca y un cupo en Libertadores.

Finalmente, Insúa dijo que "les quedan tres finales", en referencia a l encuentro ante los ambateños y los dos que tienen en la cuarta etapa.