Honestidad, conocimientos y capacidad
Ha llenado de mucha alegría, al buen aficionado al fútbol ecuatoriano, la designación de una tripleta de árbitros de fútbol, para el mundial Brasil 2014 por parte de la FIFA. Esto significa, que el arbitraje ecuatoriano no es malo y, por el contrario, que se ha visto condiciones: morales; de conocimiento y aplicación de las reglas de juego; y, físicas, en los compatriotas: Carlos Vera, Christian Lescano y Byron Romero para que, sus nombres se encuentren en la élite del arbitraje mundial.
Qué responsabilidad para esta tripleta ecuatoriana de jueces de fútbol, cuando el nombre del país y de Sudamérica estarán en la balanza, cada partido que les corresponda arbitrar. Sin embargo, yo creo en la honestidad, conocimientos y capacidad de estos tres árbitros que, seguramente, darán mucho que hablar –positivamente- sobre sus actuaciones.
En el fútbol, “el árbitro es el juez encargado de hacer que se cumplan las reglas del juego. Su cometido es dirigir todos y cada uno de los lances del juego, de forma que no se convierta en una discusión interminable entre los participantes mediante de su silbato. Cada árbitro está obligado a conocer a fondo las reglas del juego, así como las sanciones y casos especiales, que pudieran presentarse”. Por lo tanto, la personalidad, a más de los otros atributos ya mencionados, hará que su trabajo en el próximo mundial, sea de lo más justo y real.
Los seres humanos no somos perfectos, por lo tanto, podemos cometer errores pero, ninguna falta grave y reprochable cometerá la tripleta de jueves, si esos posibles errores, son de buena fe y, solamente eso, errores. Muchas de las situaciones difíciles, son aquellas que “reflejan” cuando existe mala intención. Por lo tanto, la honestidad, el conocimiento y la capacidad de aplicar las 17 reglas del fútbol, tienen que conjugarse con la personalidad que debe tener cada uno de los integrantes de la tripleta de arbitraje pues, esa seguridad que demostrarán en el campo de juego, no permitirá que nadie, dude de lo que están haciendo.
Distinguidos coterráneos que van a cumplir con esta tan difícil pero honrosa misión, todos los ecuatorianos estaremos pendientes de su trabajo y, estamos seguros, que cuando regresen, será en medio de buenos comentarios y, por qué no, luego de pitar la final en el famoso Maracaná, ya que, de ustedes dependerá que sean tomados en cuenta, no solo en las distintas fases del torneo, sino –incluso-, en la final del campeonato de fútbol. “Cuando se quiere, todo se puede”, dice uno de los adagios populares. Por lo tanto, hay que poder de parte –para que- su rendimiento sea ejemplar y justo pero, siempre con la exigencia lógica, de que la aplicación de las reglas, será lo más apegadas a las mismas.
Mucha suerte, ya que todos la necesitamos y, continúen adelante con su preparación –sicológica, de conocimientos y con mucha honestidad y justicia-, ya que, ese logro que hasta el momento han alcanzado, no merece que lo “lancen por la borda” pues, lo que tienen por delante, es una maravillosa oportunidad. Recuerden que Dios da oportunidades a los seres humanos a cada momento, aunque no siempre, ésta se repite.
Jorge García Romo.