(1-1) Los Morlacos alcanzan un empate "Monumental" y nublan el panorama torero.

Enviado por zecarlos el Sáb, 12/09/2009 - 22:02

Los ganaba el Barcelona hasta el minuto 77, cuando un conocido de la casa apareció para poner el empate. Rodrigo Teixeira marcó el gol que le permite al Cuenca llevarse un punto valioso de Guayaquil; Samudio abrió el marcador a los 63.

 Barcelona y Deportivo Cuenca se jugaban cosas importantes en el Estadio Banco Pichincha. Ambos luchan por salir del fondo de la tabla acumulada, que envía a dos equipos a la serie B; los toreros más complicados, décimo primeros con 34 y los morlacos novenos con 37.

La primera media de hora de juego fue pareja, con acciones de lado y lado que fueron tibias llegadas. Sin embargo, el local sintió la presión y buscó con más ímpetu el arco rival.

Hernán Encina fue sin duda alguna el jugador más incisivo de Barcelona. En sus pies tuvo las más claras opciones, pero el portero Dreer le peleó el título de mejor jugador de la primera etapa.

A los 32 minutos una gran jugada por derecha, desarmó la defensa morlaca, pero Encina no pudo definir ante la salida de Dreer, quien atajó con lo justo en el mano a mano.

Luego, el mismo Encina remató desde un costado, pero su zurdazo fue bloqueado por el arquero visitante, que con una gran estirada mandó el balón al córner.

En Barcelona, ingresó al cambio Pablo Palacios, en sustitución de Nazareno. El cambio tuvo como objetivo recomponer el ataque torero, y darle más fuerza.

Sin embargo, Juan Manuel Llop no tuvo éxito en la primera etapa y ambos se fueron al descanso con el marcador igualado.

Para la segunda etapa, a Barcelona le costó acercarse y ordenar sus ideas en el campo defendido por el Cuenca y no fue sino hasta el minuto 61, que llegó con peligro al arco de Dreer. Un cabezazo de Román fue descolgado de un ángulo por el argentino.

Y en la siguiente jugada, a la salida de un córner, el mismo Román fue derribado por Teixeira en el área y el juez Daniel Salazar señaló el punto penal. A la cita desde los doce pasos acudió Juan Samudio, quien no se puso nervioso y con tiro rasante a la izquierda marcó el primero.


Luego del gol, los dirigidos por Llop permitieron que los de Duró crezcan en su juego y pareció que se conformaban con la mínima ventaja.

A los 72, el Cuenca ya anunció con un remate de José Granda que se fue por encima del arco de Banguera. Cinco minuto más tarde llegó el empate.

Un centro de Holger Matamoros desde la izquierda halló a Rodrigo Teixeira, quien ante la marca de tres toreros, en el corazón del área, desenfundó un zurdazo que le rompió las manos a Banguera y se fue a morir en el fondo de las redes toreras.


El brasileño bailó zamba en su festejo y se redimió de su error previo al provocar la falta penal a Román.

Lo que siguió a continuación se lo pudo definir en una sola palabra: angustia; no solo en los hinchas amarillos, sino también en los colorados, quienes defendieron con todo el punto.

Pelotazos sin sentido al área era el arma con la cual Barcelona buscaba el ansiado gol, que no llegó nunca.

El juez central pitó el final del partido, que complicó aún más a Barcelona en el fondo y que le permite respirar al Cuenca.

Con este marcador, Barcelona sumó 35 unidades y sigue en el décimo primer lugar de la tabla. Y se le viene un partido complicado ante el rival de siempre: Emelec, en una edición más del clásico del Astillero

Mientras que, el Cuenca llegó a 38 unidades y ocupa el noveno lugar. La siguiente fecha enfrentará al olmedo de Riobamba.