(0-0) El "Atunero" fue a sumar en el Jocay y se llevó un punto en el clásico manabita.

Enviado por zecarlos el Dom, 09/08/2009 - 08:35

El cuadro dirigido por Fabián Bustos, el Manta, se defendió bien y se llevó un punto del Jocay, donde la Liga de Portoviejo no pudo triunfar frente a su público por su falta de eficacia en el último toque. 

Durante la primera etapa, el equipo local fue el que tomó la iniciativa en el ataque. Por medio de Luis Macías y Gigena, la "Capira" buscó abrir el marcador.

A los 19 minutos, Liga de Portoviejo tuvo la más clara del primer tiempo. Un centro desde la derecha fue rechazado a medias por el arquero Ramírez y el rebote le quedó a Gigena, quien remató de cabeza, pero el remate pegó en un compañero y no ingresó.

Por su parte el Manta carecía de ideas en ofensiva y se limitaba a defender su arco, eso sí, con orden. El zaguero Francisco Gómez fue el que más sobresalió en la última línea atunera.

La Liga de Portoviejo no anotó el gol que sus hinchas ansiaban y se fueron al descanso con el marcador en cero. Mientras que los dirigidos por Fabián "Toro" Bustos respiraron luego del pitazo final del juez Tomás Alarcón.

Para la segunda etapa, el Manta mejoró su juego, especialmente en el primer cuarto de hora. Tuvo una clara ocación de anotar, a través de de un córner, pero sus delanteros no estuvieron finos en la definición.


La "Capira" reaccionó y retomó las riendas de las acciones y con remates del "Cocacho" Macías estuvo a punto de cantar el primer tanto. En Manta, el portero Ramírez empezaba a convertirse en figura.

Cuando mejor jugaba el local, Cedeño agredió infantilmente a un rival y vio la cartulina roja a los 63 minutos. Esto influyó para que el conjunto universitario disminuyera su dominio y le permitió al Manta crecer en ofensiva.

Sin embargo, Liga de Portoviejo creó las mejores chances a través del contragolpe, pero de nuevo el Manta se defendió con criterio y terminó llevándose el punto del Jocay tras el pitazo final.

El premio fue para los visitantes, quienes continúan invictos en la segunda etapa.

En cambio los locales se tuvieron que conformar con un amargo empate, en el clásico manabita.