México obligado a levantar cabeza en la segunda era de Aguirre
Sin tiempo para ensayar y con el futuro en un brete, México pone hoy en marcha la segunda era de Javier "Vasco" Aguirre como seleccionador, obligado a levantar la cabeza en su árido camino al Mundial de Sudáfrica 2010.
Un par de años de resultados malos, dos técnicos cesados -Hugo Sánchez y Sven Göran Eriksson- han llevado al equipo de México al cuarto lugar del hexagonal final de la Concacaf con un triunfo en casa y derrotas de visita en Estados Unidos y Honduras.
Lejos hoy de las tres plazas directas asignadas a la Concacaf y apenas a nivel de una hipotética repesca mundialista, el temor de los dueños del balón a perder el negocio de Sudáfrica 2010, forzó un golpe de timón en el banquillo mexicano.
Estados Unidos, que le ha arrebatado la supremacía regional al "Tri", Costa Rica y Honduras, están por encima de México en la ruta de clasificación al Mundial, y sólo El Salvador y Trinidad y Tobago están por debajo de ellos.
Hace ocho años México estaba hundido después de cinco juegos de la eliminatoria y Aguirre llegó con la solución en relevo de Enrique Meza.
México tiene ahora una situación parecida después de tres partidos de la eliminatoria 2010 y, tras el cese de Eriksson, Aguirre está de vuelta con la esperanza de que aplique una cura similar a la selección.
Aguirre se ganó el respeto a rescatar al México del marasmo del 2001 para llevarlo al Mundial de Corea-Japón 2002, desde donde partió después a su aventura europea personal y hoy el reto parece similar.
La diferencia, no obstante, llegará del lado de Aguirre, que tiene ahora una experiencia que no tenía en 2001, su paso por la Liga de España como entrenador del Osasuna de Pamplona y el Atlético de Madrid.
El nuevo técnico tendrá poco espacio de maniobra desde su presentación, este jueves 16 de abril y el 1 de junio, cuando tendrá disponible a los jugadores ante el calendario mexicano que ya ve venir otra liguilla por el título y el final del torneo para el 30 de mayo.
El reto comenzará el 6 de junio con una visita a El Salvador ante la impotencia de encontrar un partido amistoso que le permita conocimientos previos en un paradoja de un equipo famoso por jugar amistosos innecesarios sólo por ganar dinero.
Junio será el mes de Aguirre porque la Federación ha preparado una larga concentración que prácticamente incluye los partidos con El Salvador del 6 de junio, contra Trinidad y Tobago del 10 de junio y tres amistosos con rivales por conocer.
El 5 de julio, México comenzará su participación en la Copa Oro de la Concacaf, como participante del grupo C que completan los seleccionados de Panamá, Guadalupe y Nicaragua, con partidos en varias sedes.
En la anterior edición de la Copa Oro, en 2007, México fue subcampeón al perder la final ante Estados Unidos y con ello la posibilidad de jugar la Confederaciones de Sudáfrica, el preámbulo de Mundial.
Después de esto, México ganó el tercer puesto de la Copa América disputada en Venezuela, en lo que fue además el cenit de la era de Hugo Sánchez, caído en desgracia al fallar en clasificar a los Juegos Olímpicos de Pekín 2008.
La salida de Sánchez permitió una etapa de transición con Jesús Ramírez, famoso por su éxito del Mundial sub 17 del 2005, y nueve meses de era de Eriksson, marcados por no poder ganar de visitante y por no darle un estilo propio al equipo. EFE.