Pekín pretende implantar un sistema de alta tecnología de reconocimiento facial para identificar hooligans a las puertas de los recintos deportivos de cara a los JJOO y prohibirles la entrada, informó la prensa local.

Este sistema nos facilitará mucho mantener alejados a los alborotadores del interior de los estadios, dijo Liu Xuechao, un alto cargo de la Policía de Pekín.

El sistema, desde las puertas de los estadios, es capaz de identificar antes de que accedan al recinto a aquellos que previamente han sido identificados como hooligans.

Para ello, el aparato escanea los rostros de la multitud y las coteja rápidamente con una base de datos de caras comparando elementos como las estructuras óseas o la distancia entre los ojos hasta el punto de distinguir a los elementos fichados incluso si van maquillados.

El sistema se pondrá en funcionamiento el 1 de marzo en los recintos de fútbol pequineses, en donde hasta hoy los episodios de violencia física han sido aislados, y a los aficionados se les reprocha más su afición al abucheo o al insulto.

Una vez comprobada su eficacia será de suma utilidad para los JJOO, si bien será necesaria una estrecha colaboración entre Pekín y las fuerzas de la ley de otros países participantes para conseguir contar con una importante base de datos de fichados.

La aplicación desde el mes que viene de las nuevas normas de seguridad pública contempla castigar a los alborotadores chinos prohibiéndoles el acceso a los recintos deportivos durante un año.

Si los alborotadores tratasen de acceder a un estadio durante su sanción, la policía tiene la orden de expulsarlos por la fuerza si fuese necesario.

Pekín está poniendo un gran empeño en materia de seguridad de cara a los JJOO de 2008; la semana pasada recibió la visita del Comandante de la Policía Nacional de Israel y el mes pasado a miembros del grupo de expertos en seguridad olímpica de Atenas.