Didier Deschamps y Marcel Desailly conocían el sistema de corrupción impuesto en el Olympique de Marsella por Bernard Tapie y, en particular, la compra de un partido contra el Valenciennes, indicó hoy Jean-Jacques Eydelie, que jugó en el club marsellés en la temporada 92-93.

Eydelie dio hoy una rueda de prensa en París, un día antes de que salga a las librerías su biografía en la que narra la corrupción y el dopaje del Olympique de Marsella justo antes de proclamarse campeón de Europa en 1993.

El ex-jugador afirmó que publica el libro para respetar la carrera de algunos y poder mirar a mis hijos a los ojos.

Estaba destruido humanamente. He necesitado todos estos años para reconstruirme y encontrar la forma de calmarme, indicó.

Negó que se trate de una venganza contra Tapie, el cual le impuso una demanda por difamación tras las primeras revelaciones del ex-jugador en la prensa francesa.

En su libro, titulado Ya no juego, Eydelie narra cómo fue inyectado con una sustancia extraña minutos antes de la final de la Liga de Campeones contra el Milan en 1993, al igual que otros de los titulares.

Acepté esa inyección de la cual no conocía la naturaleza (...) Tuve una impresión desagradable en la boca, mis piernas reaccionaban de forma extraña (...) Me gustaría saber lo que había allí dentro, indica el futbolista en su libro.

Varios de los jugadores titulares del Marsella durante aquella final que se disputó en Munich han negado la versión de Eydilie sobre las inyecciones previas al partido.

El ex-futbolista relata también que la compra de partidos era una práctica habitual en los años de Tapie.

Había muchos jugadores que hacían llamadas a antiguos compañeros para tratar de que el Marsella ganara más fácilmente los partidos, indicó el jugador ante la prensa, al tiempo que señaló que los futbolistas estaban sometidos a "una gran presión" de la parte del propietario del club.

Entre los citados figuran Deschamps y Desailly, que participaron en una reunión en un barco en la que, según Eydelie, se les emplazó a contactar a jugadores del Valenciennes.

Indicó que él sólo participó en la compra del partido al Valenciennes, cuando entregó un sobre a la esposa de un jugador de ese equipo.

Eydelie critica duramente a Deschamps, al que califica de egoísta y de no preocuparse por las reivindicaciones de los jugadores pese a ser el capitán del equipo. Didier Deschamps es un oportunista. Acapara todo lo que puede. No hay lugar para los sentimientos. El y Desailly preparan meticulosamente su éxito. Se mostraron calculadores, escribe.

Eydelie fue condenado por ese caso en 1995, al igual que Tapie y que el que fue director general del Marsella Jean-Pierre Bernes.