Aucas, lágrimas de todo un pueblo

Enviado por andre el Lun, 12/08/2013 - 18:13

Dos goles de pesadilla, obsequio adelantado de navidad, del veteranísimo arquero Paúl Alarcón, determinaron al final un lamentable contraste (2-3), aquel que provoca lágrimas de dolor y gritos destemplados, de todo un pueblo, que castigó con frases duras a quienes en la cancha defraudaron las esperanzas de victoria del equipo más querido de Quito.

Cuando nadie lo esperaba, vino el modesto Imbabura y ganó al Aucas, con un planteamiento sencillo, con jugadores que derrocharon una preparación física exuberante, corriendo la cancha como si se tratara de una competencia de velocidad.

Cuando se encendieron los foquitos de navidad, muy adelantados, porque todavía no estamos en diciembre, el triste panorama de los fatídicos minutos iniciales, no cambio en nada, porque fue Francisco Mera (10m), fue quien agradeció el obsequio de Alarcón, que salió en forma abrupta y apresurada al tratar de atrapar un balón, que no tenía historia ni peligro.

Y después de 20 minutos, la pesadilla de Alarcón se repitió cuando el balón cruzado del mismo Francisco Mera, se le coló entre sus manos.

Jugando mal, pero con garra y decisión, Willy, quien luchaba a veces poniendo la pierna arriba, producto de su desesperación, puso banquete al paraguayo Hermosilla (43m), que por fin, de cabezazo, al tercer partido, concretó su gol.

Pero los desajustes de Quintero, Mallitasig, Triviño y Corozo, continuaron, permitiendo que aparezca, en espectacular contragolpe (52) Leandro Pantoja para lograr el aterrador y fulminante 3-1.

Ahí apareció la mano del inteligente Sixto Vizuete que puso una doble línea de 5, cerrando lo que podía ser una goleada. Pero fue John Minda (68m) que puso el drama, cuando Aucas atacaba con todo,  buscando la victoria.

No hubo tiempo para más. Un partido que se presentaba como para festejarlo con la victoria, terminó en una cruel pesadilla, con jugadores que jugaron el peor partido del año, que fueron un costal de nervios, que tuvieron tantas imperfecciones que solo al final, se dieron cuenta de lo que hicieron, por el pésimo estado de ánimo con el que salieron de Chillogallo.

Golpeados psicológicamente por el tremendo mazazo del primer gol, fue Wellington Sánchez quien agarró la manija del partido y con pelotazos cruzados, buscó la presencia de Hermosilla y Figueróa.

Los movimientos incesantes de Domingo Martínez y Edwin Méndez, obligaron al repliegue de los visitantes que impusieron una doble línea de cuatro defensores, dejando que el corpulento León sea el que luche en solitario.

Y cuando nadie lo esperaba vino el segundo de la visita, tras rápida acción de Francisco Mera, que invento un malabar en el área chica, pasado el balón por las temblorosas manos del irreconocible Paúl Alarcón, para el 2-0. Se jugaban apenas 30 minutos. Hermosilla frenó el crecimiento de los visitantes con exitoso cabezazo.

Y vino la complementaria y no hubo mejoras. Una acción electrizante de Leandro Pantoja, significó el lapidario 3-1. Minda acortó cifras, 2-3, mientras el drama escalaba las gradas del silencioso estadio del sur.

Después los imbabureños se defendieron con éxito, utilizando además la quema infame de tiempo, los revolcones propios de los vivos criollos.

Y aunque los malditos francotiradores que hoy están de plácemes ( por la derrota de Aucas) esperan otro traspié, es bueno decirles a jugadores y dirigentes que hoy más que nunca deben estar unidos, imponiendo o redoblando el concepto claro de sacrificio, consiguiendo definir una identidad futbolística, es decir, saber a qué se quiere jugar, y hacerlo.

Ese es el anhelo ferviente de los auténticos hinchas de Aucas, aquellos que les dan ánimo en los momentos duros, cuando se pierde y no piden la cabeza del entrenador con gritos destemplados y cobardes.

MENOS NERVIO Y MÁS LUCHA

Deseamos fervientemente que en lo que resta del largo evento, Aucas vigorice paso a paso su innegable poderío, que no solo se basa en el talento incomparable de sus jugadores, sino que supere la eficaz organización, sobre la base del  poderío espiritual. Y si a ese elemento intangible, pero decisivo a la hora de la verdad, sumamos una gran preparación física y mental, asimilando estrategias y tácticas, solamente ahí sabremos a qué estamos jugando.

La idea de consolidar tener una identidad no es una quimera. Que tenga dos centrales que sean rápidos, que muestren siempre temple y talento, con dos laterales que se proyecten con convicción y se conviertan en el pulmón de oxígeno determinante para el triunfo. Que los volantes de creación le aporten mayor despliegue físico al conjunto. Que los delanteros, sean gladiadores, que inventen en el área, que luchen hasta la extenuación.

Que cuando venga la marca a presión, salga la inspiración como arma para el desequilibrio. Es decir, ahí deben asomar los laterales, volantes, e incluso la solidaridad de los delanteros, que poniéndose el overol, sean los auténticos obreros de la victoria, marcando, asfixiando y derrochando entusiasmo y calidad.

Entonces, el esfuerzo de todos, sepultará cualquier duda que se presente en el interior de un grupo donde todo es ilusión, intensidad, ideas, espíritu de cuerpo y de lucha, juego aplomado, sin sonrisas, donde la prolija dignidad, sin rechazos alocados, sin pescar a río revuelto, se convierta en la demostración de habilidad, diafanidad deportiva y fervor de todo un pueblo noble y apoyador como el auquista.

Si pone corazón y convicción, Aucas podrá mostrar en los partidos restantes, que no todo está perdido, que siguen en la batalla, jugando  el fútbol espiritual y práctico que todavía lo tiene. Es decir, Aucas que tiene jugadores de buena técnica, debe imponer su ritmo y precisión, debe contar con jugadores que derrochen magia, aquella que llevan en la sangre, cuando sienten la presión de la adversidad. Solamente ahí sabremos si nuestro sueño se puede convertir en realidad.

PARA LA ESTADÍSTICA

SD.AUCAS.- Paul Alarcón; José Quinteros, Santiago Mallitasig, Juan Triviño, Franklin Corozo; Domingo Martínez, Edwin Méndez, Wellington Sánchez, Darwin Suárez; Gustavo Figueroa, Christian Hermosilla

Goles: Christian Hermosilla (33m) y John Minda( 68m)
DT: Julio Daniel Asad (argentino)

Imbabura S.C: Peter Espinoza; Francisco Mera, Alexis Santacruz, Juan Guerrón, Luis Guerrero; Alex Buendía, Ronald De Jesús, Roberto padilla, Toni Alegría; Leandro Pantoja, Wamen León
Goles: Francisco Mera (16 y 30m); Leandro Pantoja (52m)
DT: Sixto Vizuete (ecuatoriano)

Gonzalo Melo Ruíz