¡Si así llueve, que no escampe!
Eso dice un proverbio muy antiguo en nuestro país y, creo que está my bien concebido para comenzar este comentario. Ya que, el comienzo de la “era Rueda” con la selección ecuatoriana, no pudo haber sido mejor. Estuvimos pendientes en la televisión, para mirar a los jugadores nacionales, en un partido que, pese a ser amistoso, no dejaba de tener una gran importancia. No solo porque apenas son dos veces que hemos ganado a México, sino que, es la primera ocasión que esto ocurre en tierras aztecas. Creo que analizar el partido mismo, no me corresponde pues, muchos periodistas lo han realizado ya, en Ecuador y en México e, incluso, a través de periódicos e informativos de la televisión en el mundo entero. Deseo hacer un comentario de lo que significó para mi, mirar este cotejo que, jugando bien, lo ganaron nuestros compatriotas.
El equipo está renovado en un gran porcentaje pues, quienes forman parte del equipo anterior, son muy pocos y, porque todavía son jóvenes. Qué grato mirar, en el arco a Banguera que fue un gran jugador y, por eso, no tiene el país ningún problema, pues creo que existen buenos goleros en el momento actual. Estuvieron a la altura, los marcadores: aunque a Paredes le costó algunos momentos para adaptarse, primero al juego y, luego, al piso sintético de la cancha pero, no fue un obstáculo para el triunfo y, Walter Ayobí, cumplió como siempre. Los marcadores centrales Caicedo y Checa estuvieron bien y, merece una enhorabuena el técnico Rueda por ello, ya que son compañeros en el mismo equpo.
El medio campo, estuvo en gran forma. Los jugadores que militan en el exterior como Noboa y Valencia, le dieron la clase que necesitaba el equipo, ayudados en gran forma por los elementos de contención. Qué bien estuvo Quiroz, con una categoría y una seguridad que contagió al resto del plantel. Quizás Arroyo fue el más abajo del equipo pero, todavía hay tiempo para conseguir ritmo de juego y seguridad. Y, en la delantera, ¿quién dijo que Benítez no cumplía en la selección? Fue el más peligroso en ese equipo y, cuando salió, el conjunto dejó de ser la fuerza que era al comienzo. Jaime Ayobí, cumplió también en gran forma.
Creo que las cosas se han realizado de la mejor manera y, no me resta sino esperar como sigue el combinado nacional, para cumplir con mi ofrecimiento. Si al plantel nacional le faltó tiempo, que ha sido mi tesis, yo pediré públicamente disculpas por mi error. Ahora, solo resta confiar, en que seguiremos cada día mejor. Adelante muchachos el país les apoya.