Los fanáticos del Boca Juniors ya pueden morirse tranquilos y en paz porque el club ha inaugurado en un cementerio de las afueras de Buenos Aires, un sector exclusivo para hinchas del equipo más popular de Argentina.

Aquellos que se han cansado de decir que son hinchas del Boca hasta la muerte pueden desde ahora reservar una de las 3.500 parcelas que se han dispuesto en el cementerio privado Parque Iraola, en la localidad bonaerense de Berazategui.

Un gran escudo del club y flores azules y amarillas adornan la entrada al sector boquense del camposanto, que cuenta con unas 150 parcelas destinadas al depósito de los restos de las viejas glorias del equipo.

El hincha del Boca es pasional en vida y también después de muerto. La idea es estar el día de mañana juntos y alentando desde el cielo, como dice la canción de nuestra hinchada, afirmó el dirigente Orlando Salvestrini.

La iniciativa forma parte de la innovadora política de mercadotecnia del Boca, que ya tiene su propia flota de taxis, una revista, un programa propio en la televisión abierta y bares temáticos, además de comercializar todo tipo de productos con su escudo oficial.

En febrero pasado nació BocaTango, un proyecto que busca atraer al turismo al promocionar la músico de Buenos Aires, la comida y productos típicos de esta capital en La Boca, uno de los barrios más emblemáticos de la ciudad.

BocaTango es una suerte de paseo temático que consiste en un restaurante criollo, un espectáculo con más de 28 personajes y músicos en vivo que representan la vida de principios del siglo XX en la ciudad, un café con diversos espectáculos de tango y un recorrido de compras de productos artesanales.

Hace unos años el club llegó a un acuerdo con una empresa de transportes para que su equipo de fútbol se trasladara en un autobús pintado con los colores azul y amarillo y, en 2003, un avión de Aerolíneas Argentinas con el escudo del Boca llevó a los jugadores a Japón para disputar la Copa Intercontinental ante el Milán italiano.

El nuevo proyecto de los dirigentes del Boca apunta a construir un barrio privado exclusivo para hinchas del club, con campos de juego en los que en el futuro pueda entrenarse el equipo.