Un buen comienzo.
El objetivo es Sudáfrica en el 2010. Camino duro y complicado el que hay que recorrer. Sin embargo el comienzo de este nuevo ciclo, que arrancó en el mundialista estadio de los Gigantes, en el amistoso ante la selección de Perú, es una invitación a ilusionarse y a creer que una vez más la tricolor puede alcanzar la clasificación a la cita mundialista. La selección nacional para este arranque tuvo algunas ausencias, varios de los jugadores que participaron en el mundial de Alemania, por su adaptación a sus nuevos clubes, en una medida coherente del técnico Suárez, no fueron convocados para el compromiso en Nueva Jersey.
El viaje fue relámpago y agotador, arribaron a la ciudad de los rascacielos en la madrugada del martes y apenas pudieron realizar el reconocimiento del campo de juego. Son las exigencias del fútbol actual, tomar un vuelo, llegar y jugar. El cotejo ante los peruanos pienso que deja un balance positivo. Demostró una memoria táctica en su funcionamiento, el patrón de juego fue el que mostró en los campos alemanes, orden defensivo, buscando ser criterioso en la salida, en definitiva, imprimiendo su estilo o mejor ratificando la identidad que ha ido madurando en todo este proceso que arrancó con la labor de Drascovic, continuó con Maturana, Gómez le imprimió mayor personalidad y Suárez con inteligencia ha sacado el mayor provecho. Sí, después de mirar la actuación del combinado tricolor creo que hoy sí podemos manifestar que el fútbol ecuatoriano tiene su propia identidad.
En el primer tiempo estuvo lo mejor de Ecuador, buen manejo del sistema y la pelota, tranquilidad e inteligencia para explotar en el momento justo. Fue apenas 1-0, pudieron y deberion ser 3. Lastimosamente Guagua falló en la ejecución de un tiro penal y sobre el final del primer acto, el vertical le negó el tanto a Kaviedes. El golazo de Benítez nos dio la confianza de que estamos en el camino correcto. Para la segunda etapa, faltó manejar los tiempos, defenderse con la pelota, es cierto que los del rimac mejoraron su producción. El cuadro tricolor sintió el esfuerzo físico. A 30 minutos del final llegó el empate, aspecto en mi punto de vista secundario, es cierto que a todos nos gusta ganar siempre. Pienso que en este tipo de enfrentamientos hay que ir mas allá en el análisis, que solo el simple y frío resultado.
Aparecieron jugadores nuevos, Montaño, el zaguero de Barcelona demostró que tiene nivel y jerarquía para ponerse la tricolor, en ningún momento le pesó la camiseta. Soledispa ratificó que es un jugador para grandes retos y adelante lo mejor, un chico de apenas 18 años, los cumplió en la víspera del cotejo, impresionante físico, buenas hechuras, con personalidad y deseos de llegar lejos, Felipe Caicedo, si lo saben llevar va a ser un crack en toda la extensión de la palabra. Benítez, rápido y atrevido, con visión de gol, se juntó a Caicedo y armó la grande. Pueden formar una dupla de excepción. Sin duda, el abanico de posibilidades se abre para el seleccionador nacional, siguen apareciendo buenos jugadores, hay trabajo, existe planificación. Cómo no ilusionarse con que otra vez podemos ver flamear la tricolor, después de cuatro años, en el Continente Africano.