Tenis-Abierto EEUU: Youzhny también fue verdugo de Nadal y Federer siguió triunfal.

Enviado por roberto el Jue, 07/09/2006 - 11:17

El esperado tercer duelo en una final de Grand Slam entre el Suizo Roger Federer y Rafael Nadal no se dará en el Abierto de Estados Unidos, después que el ruso Mikhail Youzhny, número 54 del mundo, venció al jugador español por 6-3, 5-7, 7-6 (5) y 6-1, en los cuartos de final.

Todo lo contrario que sucedió con Federer, el número uno del mundo, que una vez más confirmó su condición de gran favorito al ganar por 6-3, 7-6 (2) y 6-3 al francés Marc Gicquel, para pasar a los cuartos de final sin que hasta ahora haya perdido un sólo set.

Mientras que Youzhny, que se ha convertido en el auténtico verdugo del tenis español y latinoamericano al ganar en la segunda ronda al chileno Nicolás Massu, en la tercera al David Ferrer y en la cuarta a Tommy Robredo, en tres horas y 16 minutos logró su mejor triunfo como profesional al estar por primera en una semifinales de un Grand Slam.

Youzhny, de 24 años, que disputa su quinto Abierto como profesional, tendrá de rival en las semifinales al ganador del partido que esta noche disputan el estadounidense Andy Roddick, noveno cabeza de serie, y el australiano Lleyton Hewitt, decimoquinto, en el duelo de ex campeones del Abierto.

Ha sido un gran triunfo, algo que no me esperaba aunque tenía confianza de hacer mi mejor tenis cuando salí al campo, declaró Youzhny. Haber ganado a Nadal, número dos del mundo, me da confianza de cara a lo que pueda hacer en la semifinal.

Youzhny, que se había enfrentado cinco veces a Nadal como profesional, logró su segundo triunfo por tres para el jugador español, que le había ganado en los tres últimos enfrentamientos consecutivos.

El partido no comenzó nada bien para Nadal, que se sintió incómodo en la pista Louis Armstrong, y sus golpes no tenían el efecto que se esperaba, mientras que Youzhny se imponía desde el fondo de la pista con golpes ganadores de derecha que iban a ser la clave.

Con esta tónica se llegó al octavo juego para ver como Nadal no pudo mantener su saque en el octavo juego y se colocaba con la ventaja de 5-3 que iba a ser suficiente para que Youzhny pusiese comenzase abrir la puerta del triunfo.

Nadal reaccionó en la segunda manga para no perder el saque y llegar al duodécimo juego y conseguir que Youzhny no pudiese evitar que un 30-40 adverso y ver como el doble campeón de Roland Garros logró igualar el partido después de haber trabajado durante una hora y 40 minutos.

El jugador español se dio cuenta que si se adelantaba un poco más en la pista y movía a su rival, el triunfo podía llegar y eso fue lo que hizo para hacer su mejor tenis en la tercera manga, aunque ninguno de los perdió el saque hasta que llegó al decisivo décimo juego.

Nadal, con su mejor tenis, logró ponerse 0-40 en el saque de Youzhny y cuando tenía todo a su favor para lograr con tres pelotas de sets el 2-1 vio como tres errores no forzados permitió a su rival hacer cinco tantos consecutivos y seguir con vida para que en el desempate superar también un 4-5 y asegurarse la manga.

A partir de ese momento, Nadal vivió una auténtica pesadilla en el cuarto set al ser barrido por un contundente 6-1 que reflejaba con claridad que al margen del buen partido que había hecho Youzhny, el peor enemigo del jugador español había sido su actitud y estrategia para afrontar el partido más decisivo del torneo.

Ahora Nadal, que participaba en su cuarto Abierto, se quedó a las puertas de ser el cuarto jugador español que lograba estar en las semifinales del Abierto después que lo consiguieron, Manuel Orantes, Carlos Moyá y Juan Carlos Ferrero.

Las estadística no dejaron ninguna duda de la superioridad del Youzhny con un 66 por ciento da acierto del primer saque, siete aces y tres dobles faltas, mientras que pegó 49 golpes ganadores por 34 errores no forzados con 4 de 9 oportunidades de roturas de puntos y ganó 41 tantos de 53 subidas a la red para un total de 139 ganados.

Nadal logró un 63 por ciento de acierto del primer saque, un aces y una doble falta, pegó sólo 23 golpes ganadores y cometió 38 errores no forzados.

Mientras que sólo convirtió 2 de 8 puntos de break points y se quedó con 22 tantos de 39 subidas a la red para un total de 112 puntos ganados.

Esta vez las pancartas de Vamos Rafa y ¿Te quieres casar conmigo?, que sus seguidores mostraron en las gradas de la pista Louis Armstrong no fueron suficientes para ver ganar a su ídolo.

Todo lo contrario de lo que sucedió con Federer, que continuó su marcha triunfal en el séptimo Abierto que disputa como profesional y en el que busca conseguir el tercer título consecutivo.

El número uno del mundo, que disputa el séptimo Abierto, tendrá como rival en los cuartos al estadounidense James Blake, quinto cabeza de serie, que venció 6-4, 6-3 y 6-1 al checo Tomas Berdych.

Federer, que busca conseguir su tercer título consecutivo en el Abierto y el noveno de Grand Slam, dominó por completo el partido y sólo en el segundo permitió que Gicquel, verdugo del español Juan Carlos Ferrero y del argentino Gastón Gaudio, le hiciese trabajar un poco más forzando el tiebreak, que lo ganó fácil.