El sueco Jonas Bjorkman se clasificó hoy para las semifinales masculinas, tras imponerse al checo Radek Stepanek por 7-6 (3) 4-6 6-7 (5) 7-6 (7) y 6-4 en 4 horas y 3 minutos.

El más veterano de los tenistas que quedan en el cuadro masculino -tiene 34 años-, tendrá que medirse en la penúltima ronda de la competición al campeón Roger Federer, que se impuso hoy al croata Mario Ancic en tres sets en la Pista Central.

No me puedo creer que haya llegado hasta la semifinal. Estoy muy emocionado, es un sueño hecho realidad, comentó el tenista nórdico, que ganó 6 puntos de break de las diez ocasiones de ruptura de las que dispuso, mientras que su rival gozó de 15 momentos de break, de los que supo aprovechar 6.

El escandinavo, al que hoy le respondió bien su saque en la pista 1 y se anotó 56 puntos ganadores, confesó que ya no pensaba que le quedarían por jugar más Wimbledon en su carrera deportiva.

Por eso, quise abrazar a todo el mundo, comentó, en alusión al gesto que hizo con los brazos tras concluir el encuentro.

Bjorkman, que logró nueve saques directos y cometió 6 dobles faltas, admitió que durante el largo enfrentamiento contra el checo jugó bastante bien, pero señaló que ambos atravesaron altos y bajos.

La clave, comentó, está en no rendirse nunca. Y bueno, finalmente, pude remontar el partido, pese a los 26 errores no forzados en los que incurrió.

Por su parte, Stepanek, el hombre que despidió de esta edición de Wimbledon a los tenistas españoles Juan Carlos Ferrero, en la pista 2, en octavos de final, y a Fernando Verdasco, en la 14, en octavos, consiguió un total de 20 Aces y de 66 puntos ganadores.