La canciller alemana, Angela Merkel, mediará para buscar una reconciliación entre el seleccionador, Jürgen Klinsmann, y el presidente del Comité Organizador del Mundial 2006, Franz Beckenbauer, para que el torneo se enfrente como una tarea nacional.

Merkel ha invitado a Beckenbauer y a Klinsmann, así como al presidente de la Federación Alemana de Fütbol (DFB), Theo Zwanziger, a una cumbre, que tendrá lugar el miércoles en la cancillería para sondear la situación actual.

Beckenbauer recientemente atacó duramente a Klinsmann por haber faltado al taller de seleccionadores de la FIFA, lo que se suma a las críticas que ha recibido recientemente el seleccionador por sus métodos de trabajo, tras la goleada sufrida ante Italia por 4-1.

La cancillería confirmó hoy la cumbre, planificada desde hace tiempo pero que ha recibido un nuevo aspecto tras los recientes problemas de la selección.

Merkel, en declaraciones que publica hoy el diario Die Welt, dice que no la terquedad ni la vanidad personal o el populismo deben poner en peligro el ambiente previo al Mundial que se iniciará el 9 de junio con el partido inaugural entre Alemania y Costa Rica.

Klinsmann se ha quejado recientemente de tener que oír críticas de gentes completamente ajenas a su trabajo como políticos y vicepresidentes de la DFB que emiten juicios sobre asuntos que no entienden.