El seleccionador de Japón, el ex-internacional brasileño Artur Antunes Coimbra Zico, considera que su equipo tienen posibilidades de llegar a semifinales en el mundial de este año.

La semifinal es accesible, creo que es posible, dice Zico en una entrevista que publica hoy la revista alemana Kicker.

No obstante, Zico advierte que para ello primero Japón tendrá que superar la primera ronda en la que ya el primer partido contra Australia será como una final.

En su grupo, Zico considera que Brasil pasará con seguridad a la segunda ronda mientras que el segundo puesto se lo disputarán Japón, Croacia y Australia.

Ya nuestro primer partido contra Australia será como una final. Tenemos que ganarlo y luego asegurar la clasificación con una segunda victoria contra Croacia, dice Zico.

Zico basa su optimismo en los progresos que ha hecho últimamente el fútbol japonés y recuerda el empate a dos goles ante Brasil en la Copa de Confederaciones.

En ese partido, dice Zico, Japón mostró que en buen día le puede ganar a los brasileños a quienes aquella noche les ayudó el árbitro.

En la entrevista, Zico también pasa revista al proceso que ha vivido el fútbol japonés bajo su dirección desde donde ha tenido que inculcarles a los jugadores mentalidad ganadora y romper la obsesión por la perfección de los japoneses.

Los japoneses tuvieron que entender que está permitido cometer errores. En la liga, antes los porteros eran sustituidos después de que encajaban un gol lo mismo que jugadores que fallaban un penalti. Eso no ocurre conmigo. Los errores son parte del fútbol. Pero no de la cultura japonesa donde la perfección es la medida de todas las cosas. Los jugadores tuvieron que aprender primero mi filosofía, explica Zico.

Zico además recuerda que cuando empezó a trabajar como entrenador en Japón los jugadores tomaban nota de sus instrucciones y cinco minutos antes del partido repasaban sus apuntes rápidamente.

En 2002, según Zico, Japón no hubiera sido eliminado en octavos si el equipo hubiera tenido la suficiente fortaleza psicológica.

Actualmente, Zico considera que Japón tiene solidez defensiva y que genera bastantes posibilidades de gol pero tiene problemas a la hora de capitalizar estos últimos.

Japón no tiene ningún delantero que marque regularmente. Takahara, del Hamburgo, no es ese delantero. Okubo, del Mallorca, es el que más se acerca a ese ideal, dice Zico.