El seleccionador alemán, Jurgen Klinsmann, explicó su ausencia del taller preparatorio del Mundial celebrado en Düsseldorf esta semana por la coincidencia con el aniversario de la muerte de su padre.

Hacía mucho que le había prometido a mi madre que pasaríamos esos días juntos en California, dijo Klinsmann, quien en los días pasados fue duramente criticado por no haber asistido a esa cita, que convocó a representantes de las 32 selecciones del Mundial.

Creí que no tendría que explicar este tipo de circunstancias privadas para justificarme. Ahora sabrá todo el mundo por qué no estuve en Düsseldorf, añadió.

El seleccionador regresó a Alemania, apremiado por el presidente de la Federación Alemana de Fútbol (DFB), Theo Zwanziger, quien le instó a mostrar más cercanía con el día a día del fútbol alemán.

Klinsmann ha recibido duras críticas de medios periodísticos y futbolísticos alemanes tras la derrota de Alemania por 4-1 en el amistoso contra Italia, al que siguió su ausencia en Düsseldorf.

El presidente del comité organizador del Mundial, Franz Beckenbauer, criticó públicamente su proceder y le instó a mostrar pasión ante el próximo partido contra EEUU, el 24 de marzo.