El Chelsea, líder del campeonato inglés, podría ser sancionado por la federación de fútbol inglesa al no haber logrado que sus jugadores se comportaran de forma apropiada, durante el partido liguero disputado contra el West Brom el pasado sábado.

Durante dicho compromiso, que se saldó con la victoria por 2-1 del Chelsea, los jugadores de ese equipo rodearon al árbitro, Mark Halsey, tras una falta del jugador del West Brom Ronnie Wallwork sobre el francés Claude Makelele, en el minuto 43 de partido.

Halsey informó a la FA del incidente y expresó su visión con respecto al hecho de que le rodearan y presionaran varios jugadores del Chelsea, informa la FA mediante un comunicado.

La pena máxima para castigar este tipo de conductas asciende a unos 360000 euros.

El colegiado informó además de un segundo incidente acaecido en el mismo compromiso liguero, en el que jugadores de ambos equipos reaccionaron con enojo a una falta cometida por el holandés Arjen Robben, del Chelsea sobre Jonathan Greening, que le costó a Robben la expulsión.