Todos los jugadores pasarán revisión médica antes del Mundial.
Todos los jugadores que sean inscritos para el Mundial 2006 deberán pasar una minuciosa revisión médica antes del torneo y en los doce estadios estarán instalados desfibriladores que pueden ser decisivos para salvar la vida en caso de un paro cardiaco.
Se trata de una gran innovación. Somos la primera gran confederación deportiva en tomar una decisión de ese tipo, dijo hoy en Dusseldorf (oeste de Alemania) el jefe del departamento médico de la FIFA, Jiri Dvorak.
Las dos determinaciones de la FIFA son una reacción a la tragedia que tuvo lugar en la Copa de Confederaciones de 2003, cuando el camerunés Vivien Foe se desplomó muerto en el campo de juego.
Sin embargo, la FIFA no podrá prohibir a ningún jugador por razones médicas participar en el Mundial.
Eso es responsabilidad de las federaciones nacionales y sus médicos, dijo Dvorak.
Por otra parte, los médicos de las 32 selecciones clasificadas se comprometieron hoy en una reunión de trabajo en Dússeldorf a apoyar la estrategia antidopaje de la FIFA.
Durante los partidos preparatorios para el Mundial, desde marzo hasta el comienzo del torneo el 9 de junio, así como en las concentraciones de las selecciones se realizarán regularmente controles antidopajes.
Durante el Mundial, al término de cada partido, dos jugadores de cada equipo serán sometidos a un control antidopaje.
La FIFA, según sus propias estadísticas, realiza 22000 controles de dopaje al año.
En 2004 hubo 88 positivos y en 2005, 78, pero durante los dos últimos campeonatos del mundo no ha habido ningún caso comprobado de consumo de sustancias prohibidas.