Argentina disfrutó de una jornada perfecta en el arranque de la Copa Davis 2006 y dejó encarrilada su eliminatoria contra Suecia, al que aventaja por 2-0 después de las victorias de David Nalbandián y José Acasuso.

Nalbandián tuvo algunos contratiempos en su duelo contra Robin Soderling (3-6, 6-2, 6-4 y 6-1) en el primer turno, mientras que Acasuso fue un vendaval que arrasó con Thomas Johansson por 6-1, 6-1 y 6-3.

El último ganador de la Copa Masters de Shangai fue contracorriente en el primer set. Estuvo impreciso y excesivamente dependiente de los errores de su rival, que apenas cometió errores. El sueco se apuntó la única ruptura de servicio del parcial que le sirvió para llevarse la manga ante la sorpresa de los casi 8.500 espectadores que colmaron el nuevo estadio del Parque Roca, de Buenos Aires.

Nalbandián sacó su credencial de número cuatro del mundo en el segundo parcial, provocó los errores en su adversario, especialmente con el revés y con un juego sólido desde el fondo de la pista se alzó con el segundo set.

El tercero fue un canto a la inestabilidad. Ninguno de los dos pudo mantener su servicio -hubo quiebres en los primeros cinco juegos- hasta que, con el marcador igualado a cuatro, Nalbandián levantó un 0-40 con su saque y partir de allí ganó nueve de los diez puntos que se disputaron para llevarse el parcial por 6-4.

Alentado por el ex futbolista Diego Maradona, que no paraba de saltar y de gritar en las gradas, el oriundo de Unquillo (Córdoba) encontró su medida, se serenó definitivamente y terminó por hundir a un Soderling (número 100 en el ránking) que a esas alturas ya no tenía más combustible.

El solo hecho de jugar la Copa Davis me motivó para revertir ese partido después de caer en el primer set, sostuvo el argentino tras el encuentro.

Soderling fue un rival muy difícil. Me sorprendió en el principio del partido corriendo mucho, pegando muchas bolas complicadas, pero después de batallar y ganar el tercer set pude sacar adelante el partido, comentó.

Nalbandián adjudicó su imprecisión a la falta de ritmo en tierra batida y agradeció el aliento de Maradona.

Es un grande: me dijo que iba a venir a verme y vino. Un maestro, señaló.

Con la moral por las nubes por su reciente triunfo en el ATP de Viña del Mar, Chucho Acasuso (33 en el ránking) dio la razón al capitán del equipo argentino, Alberto Mancini, quien lo designó tras conocerse la lesión de Gastón Gaudio y le dio la titularidad en la primera jornada de la serie.

Casi sin fisuras y con una actuación sobresaliente, Acasuso aplastó a Johansson (13 del mundo), quien varias veces realizó gestos de impotencia e incredulidad al ver cómo su rival lo paseaba literalmente por la pista.

Estoy con mucha confianza y jugué un gran partido, pero lo más importante es que terminamos el día con el marcador 2-0, destacó el nacido en la provincia de Misiones, que hoy se estrenó en la Copa Davis.

La serie continuará mañana, sábado, con el partido de dobles que jugarán los argentinos Nalbandián y Agustín Calleri frente a los suecos Jonas Bjorkman y Simon Aspelin.