El Valencia ha decidido no hacer valoración alguna de la medida adoptada por el Deportivo de La Coruña de recurrir ante el Comité de Disciplina Deportiva la decisión del Comité de Competición de que se reanude el encuentro de Copa del Rey frente al equipo valenciano a puerta cerrada en el estadio de Mestalla, tras los incidentes registrados el miércoles.

El encuentro entre el Valencia y el Deportivo fue suspendido en el minuto 44, con 1-0 en el marcador, después de que un asistente fuese alcanzado por un objeto lanzado desde las gradas, que le provocó una brecha en la ceja derecha.

El club coruñés entiende que sale perjudicado de la resolución del Comité de Competición y ha optado por presentar un recurso ante el Comité Español de Disciplina Deportiva para que dé la eliminatoria por perdida al Valencia.

Fuentes del club valencianista indicaron a Efe que desde el club de Mestalla no se quiere realizar ninguna valoración de la medida adoptada por la entidad coruñesa.

Sin embargo, las mismas fuentes recordaron que cuando el Valencia vivió a la inversa una situación similar en el estadio de Castalia el 7 de octubre de 2003, el club valencianista decidió acatar la decisión del Comité de Competición.

En aquella ocasión, el árbitro Téllez Sánchez suspendió el encuentro en el minuto 82 y con 1-1 en el marcador, tras ser alcanzado por la batería de un teléfono móvil lanzado desde la grada, después de que señalase un penalti a favor del Valencia.

Competición dispuso que se jugasen, en el mismo campo y a puerta cerrada, los ocho minutos que restaban del encuentro, que se reanudó con el lanzamiento de la pena máxima señalada en su momento.