Y todavía piensa que tiene razón el delantero de Lazio Paolo Di Canio.
El delantero de la Lazio Paolo Di Canio apeló su suspensión de una partido y la multa de 11,977 dólares que le impuso la liga italiana por realizar un saludo fascista a los aficionados la semana pasada, anunció el viernes su abogado.
El jugador levantó su brazo derecho, el clásico saludo fascista, cuando fue sustituido el sábado en el partido contra el Juventus en el estadio Olímpico.
Di Canio no jugó el miércoles contra el Lecce. El abogado Gabriele Bordoni dijo que el saludo fue fascista, no racista, y que es un gesto de pertenecer a su gente. Es indiscutible que debe poder seguir haciéndolo.
En Italia, el gesto es asociado con el mandato del dictador fascista Benito Mussolini.Di Canio pareció hacer el mismo gesto el año pasado en el derby contra Roma.
También lo hizo el 11 de diciembre en Livorno, cuyos aficionados son tradicionalmente de la izquierda política.
La comisión de disciplina de la liga italiana todavía debe tomar una decisión sobre las acciones de Di Canio en el partido contra el Livorno.
Los fanáticos más aguerridos del Lazio son conocidos por pertenecer a la extrema derecha.
La FIFA solicitó el expediente de Di Canio a la liga italiana para revisar sus acciones y proponer posibles sanciones.
El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, emprendió una campaña para eliminar los actos racistas en las canchas de fútbol.