En el estadio de San Siro, el Inter goleó al Empoli por 4 a 1, con goles de Adriano, Julio Cruz, Luis Figo y Oba Oba Martins. Ighli Vannucchi marcó el tanto del transitorio 2 a 1.

Con este resultado, el Inter suma 38 puntos y está segundo, mientras que el Empoli tiene 18 y ocupa la treceava posición junto a la Reggina.

Antes de hablar del partido, hay que contar el terrible incidente sufrido por Adriano y que pudo haber tenido consecuencias gravísimas; por suerte, al final todo acabó con un simple susto.

El brasileño chocó su cabeza con la de un defensor y quedó desmallado en el piso: en ese momento, los mismos compañeros se dieron cuenta de la seriedad del hecho y le prestaron los primeros auxilios (Verón, por ejemplo, le sacó la lengua para que el compañero no se ahogara).

Fue necesaria la reanimación por parte de los sanitarios locales, pero por suerte, en pocos minutos, el delantero recuperó el conocimiento. Obviamente, el jugador fue internado y transcurrió la noche en hospital, pero simplemente como medida precautoria: el jueves por la mañana debería poder viajar como previsto a su país.

Hablemos ahora del partido: el resultado, claro está, fue inobjetable, pero también hay que decir que el Inter tuvo un poco de suerte - otra vez se puso en ventaja luego de un puñado de segundos, gracias a un error del arquero rival - y de una buena ayuda del referí, quien le negó un claro penal a Almirón cuando el marcador aún estaba 1 a 0 en favor de los locales.

Decíamos del gol de entrada: Cambiasso remató desde unos 20 metros, Berti atajó pero rechazó la pelota hacia adelante y Adriano no tuvo problemas para controlarla y mandarla a guardar.

El Inter siguió atacando, pero el Empoli paulatinamente superó el trauma inicial, emparejó las acciones y fue creando alguna ocasión.

Hasta que llegó el momento que selló el partido: al quinto minuto de descuento de la primera etapa (debido obviamente a la lesión de Adriano), Almirón ingresó al área por derecha y fue bajado de atrás por Samuel, un penal clarísimo que sin embargo el referí no concedió.

Samuel rechazó hacia adelante, Verón lo habilitó a Cruz - ingresado pro Adriano - y el argentino, desde la media luna, despechó un derechazo que se clavó al lado del palo izquierdo de Berti.

En suma, del posible empate al dos a cero que cerró el partido sin escalas.

En el complemento el Empoli siguió jugando como en la parte final del primero, y tuvo el premio: Vanucchi despachó un zurdazo violento desde unos 20 metros y venció a Julio César.

Pero fue un fuego de paja: el Inter se despertó y tres minutos después puso en caja fuerte el resultado, con una bonita combinación Solari - Martins _ Figo que el portugués, por lejos figura de la cancha, finalizó con un derechazo cruzado marca registrada inatajable.

El resto fue pura academia y Martins encontró el gol que había buscado con insistencia sobre el final cuando, habilitado por Cambiasso, despachó un derechazo al primer palo que venció por cuarta vez a Berti.

El Inter está en salud: llegó al sexto triunfo consecutivo, y ahora se va de vacaciones con la tranquilidad de haber encontrado al fin un patrón de juego y un once tipo para interpretarlo.

Le quedan otros seis partidos hasta el enfrentamiento directo con la Juventus en San Siro: habrá que ganarlos todos y luego jugarse el resto ante la Vieja Señora. Difícil mas no imposible, veremos.

El Empoli jugó realmente un buen partido, pero esta vez tuvo que lamentar las inseguridades de su arquero y el hecho de enfrentarse a un rival claramente superior desde el punto de vista técnico. Pero el equipo está bien armado y no debería tener problemas de descenso.