El Inter aprovechó el empate del líder Juventus para descontarle dos puntos.
El Inter visitó a la Reggina y la venció por 4 a 0, con goles de Iván Córdoba, Oba Oba Martins, Adriano y David Pizarro.
Con este resultado, el Inter consigue su quinta victoria consecutiva y se ubica, con 35 puntos, en la segunda posición, a 8 unidades de la Juventus, mientras que la Reggina interrumpe una racha positiva de 5 fechas y ahora, con 17 puntos, ocupa la catorceava plaza.
El resultado fue justo, que duda puede caber, y de hecho fue casi como si el partido no se jugara, porque el Inter se puso en ventaja luego de un minuto de juego con Córdoba, en jugada de tiro libre, y aseguró el resultado con el gol de Martins (cabezazo luego del centro de Figo desde la derecha) luego de apenas un cuarto de hora de juego.
Demasiada fue la diferencia de valores en campo, y los jugadores de la Reggina demostraron sentir el impacto desde un comienzo del encuentro.
Por esa razón, ni siquiera la doble desventaja pudo producir una reacción de los locales, y el Inter controló a placer el balón, de la mano de un Luis Figo inspiradísimo y bien asistido por Verón y Stankovic, desperdiciando varias ocasiones de gol y sellando la goleada con un tanto de Adriano, quien recibió en la parte derecha del área, se fue asentando y dejó salir un remate violento de zurda que venció al arquero Pavarini.
El arquero local no tuvo responsabilidades y muy por el contrario jugó un buen partido e impidió que el pasivo de su equipo tomara dimensiones desastrosas.
En la segunda etapa el libreto siguió igual, con el protagonismo de Figo, decidido a encontrar su grito personal, pero una vez el travesaño y otras las buenas atajadas de Pavarini le negaron esa satisfacción.
El portugués, entonces, tuvo que conformarse con meter la tercera asistencia del partido, esta vez para Pizarro luego de una pared estrecha, y el chileno definió con un derechazo por arriba del cuerpo del arquero.
Fue importante este triunfo del Inter, que permite darles continuidad a las ambiciones de remontada del equipo.
Más aún fue importante por como llegó: en un campo difícil como Reggio Calabria, el equipo no tuvo fisuras, definió enseguida y no le permitió nunca al local levantar la cabeza.
Único dato negativo la amonestación de Córdoba, quien será suspendido por haber alcanzado la cuarta tarjeta amarilla.
¿Qué decir de la Reggina? Claramente no son estos los partidos que puede ganar, y el gol recibido luego de 90 segundos echó por la borda todo el planteo táctico preparado por Walter Mazzarri, quien evidentemente pensaba defenderse y tratar de buscar suerte en contraataque.
Además, los locales jugaron sin siquiera un delantero verdadero en la cancha, y el pobre Cozza hizo lo que pudo pero fue anulado por la atenta defensa visitante.