Boca Juniors quedó a un paso del título de campeón del Torneo Apertura 2005 del fútbol argentino tras su victoria sobre Independiente (2-0) y el empate a cero con Newell's Old Boys que el domingo bajó a Gimnasia y Esgrima La Plata al segundo puesto.

Con estos resultado los boquenses suman 37 puntos y Gimnasia, que nunca ganó una Liga en el fútbol profesional de su país, 36 a falta de un capítulo para que termine una competición que tuvo en las últimas siete de las 18 jornadas disputadas a casi la mitad de sus participantes como candidatos al campeonato.

Boca visitará el miércoles a Olimpo en la ciudad de Bahía Blanca, donde las entradas se agotaron hace dos semanas, y Gimnasia y Esgrima a Banfield.

BOCA, A LO CAMPEÓN
La victoria de Boca Juniors en La Bombonera, con los goles marcados por Martín Palermo y Federico Insúa en la segunda parte, provocó que el entrenador del conjunto local, Alfio Basile, varias veces abucheado e insultado por los hinchas, se retirada del campo de juego en medio de una ovación.

Un par de horas antes del encuentro el presidente del club, Mauricio Macri, había afirmado que su objetivo es que Diego Maradona ocupe el cargo de entrenador del equipo desde junio próximo, pero Pelusa, que eligió a Basile como técnico del equipo, dijo que todo dependería de las decisiones que adoptara éste en el futuro.

Basile, respaldado por los resultados que han llevado al equipo al umbral del título de campeón del Apertura y a la final de la Copa Sudamericana ante el mexicano Pumas de la UNAM, terminó rápidamente con las conjeturas: yo me quedo en Boca Juniors, disparó.

En el caso de ganar el torneo doméstico, los boquenses superarían la racha negativa que padecen desde que en 2003 se alejó del club el entrenador Carlos Bianchi, con el que obtuvieron los cuatro campeonatos sumados en la última década (Apertura'98, Clausura'99, Apertura 2000 y Apertura 2003).

 Esa racha les ha dejado fuera de la próxima Copa Libertadores y sin alegrías en el año de su centenario, en el que sólo tuvieron una mínima satisfacción al lograr la Recopa Sudamericana disputada ante el Once Caldas colombiano.

EL LOBO SIENTE QUE EL SUEÑO SE LE ESCAPA
La frustración de Gimnasia y Esgrima afectó a la mitad de la población de la ciudad de La Plata, donde la afición reparte sus simpatías entre el equipo que dirige el debutante entrenador Pedro Troglio y Estudiantes, que ganó tres Ligas en la historia.

La mejor campaña de Gimnasia se produjo en 1995, año en el que fue subcampeón, pero la actual supera a aquella con nueve triunfos y dos empates en los últimos once encuentros jugados.

El empate a cero ante Newell's tuvo como culpable al portero del equipo rosarino, el paraguayo Justo Villar, titular de la selección de su país, considerado por la prensa deportiva en el mejor futbolista de la última jornada y el mejor en su puesto en el Apertura.

Ahora Gimnasia no depende sólo de una victoria a domicilio sobre Banfield, sino también de un traspiés boquense frente a Olimpo, el equipo dirigido por Omar Labruna, quien ha declarado que la mejor manera de terminar 2005 sería impedir que Boca se proclame campeón.

Omar Labruna es hijo de un prócer riverplatense como futbolista y entrenador, Angel Labruna, quien cuando tenía que jugar o dirigir en La Bombonera entraba al campo tapándose la nariz, dando a entender que en ese mítico escenario había mal olor.

DESPEDIDA EN EL MONUMENTAL
River terminó el año con un insulso empate a uno con Quilmes y en lo inmediato aspira a superar la repesca de la Copa Libertadores, en enero próximo, para enderezar su rumbo errático que le ha dejado con las manos vacías en 2005 tras disputar con magros resultados dos Ligas, la Copa Libertadores y la Sudamericana.

NO TODOS LOS LAURELES SERÍAN PARA BOCA
El torneo Apertura llega a su fin la con la posibilidad de que su máximo goleador sea el delantero Javier Cámpora, del colista Tiro Federal, que ha marcado 13 goles de los 22 que su equipo logró en su debut en la Primera División.

Que un jugador de un equipo situado en el fondo de la clasificación termine el torneo como principal realizador jamás ha ocurrido en la historia del fútbol de este país.

Sólo podrían evitar esta situación el delantero del Boca Juniors Rodrigo Palacio si el miércoles marca cuatro goles ante Olimpo; el punta uruguayo Gonzalo Vargas del Gimnasia y Esgrima si anota la misma cantidad frente Banfield, y el juvenil Sergio Agüero del Independiente de Avellaneda en el caso de que marque cinco en el partido pendiente contra Rosario Central.