La justicia lusa abre la puerta al fin del traspaso millonario.

Enviado por bielo el Mié, 14/03/2007 - 14:33
El fútbol luso tiembla después de que el Tribunal Supremo portugués sentenciase que los jugadores que abandonan un club sólo tienen que pagar lo que resta por cobrar de su ficha, decisión que podría afectar al mercado internacional.

El presidente del Sindicato de Jugadores Profesionales de Fútbol (SJPF), Joaquim Evangelista, dijo hoy a Efe que la decisión judicial, emitida el pasado lunes pero divulgada hoy, crea jurisprudencia y puede ser invocada de inmediato.

Evangelista explicó que esta sentencia afecta al mercado portugués, pero se trata de un nuevo "caso Bossman" y tendrá repercusiones en el reglamento internacional de traspaso de jugadores.

El tribunal anuló tres cláusulas del contrato colectivo firmado en 1999 entre el SJPF y la Liga Portuguesa de Fútbol Profesional (LPFP), por las que los jugadores tendrían que indemnizar al club de acuerdo a la cláusula de rescisión.

El Supremo consideró además que los jugadores pueden firmar por otro equipo, a más tardar, a la apertura del siguiente mercado de fichajes, mientras que actualmente no pueden hacerlo durante el tiempo en el cual esté en vigor su anterior contrato.

Tras esta sentencia que pone en causa las cláusulas de rescisión, la máxima estrella del Benfica, Simao Sabrosa, podría abandonar el club por unos 5 millones de euros, sólo una cuarta parte de los 20 millones que pide el club luso, dado que le restan 40 meses de contrato y cobra unos 125.000 euros mensuales.

El Sporting de Lisboa también pide 20 millones por una de sus grandes promesas, el joven Nani, aunque ahora el extremo portugués podría salir del club verdiblanco por sólo 192.000 euros.

El presidente del sindicato de futbolistas indicó que, tras meses de silencio, la LPFP ya se puso en contacto con ellos para comenzar a estudiar posibles alteraciones en el contrato colectivo.

El máximo responsable de la Liga, Hermínio Loureiro, se mostró cauteloso ante la revolución que puede desatarse con esta sentencia y reafirmó que iniciaron conversaciones con el sindicato para alcanzar un acuerdo de equilibrio, porque el fútbol no quiere estar al margen de la ley.

El proceso judicial se abrió en 2000 cuando el atacante portugués José Antonio Ramos, "Zé Tó", fichó con el Salamanca español, a pesar de que había firmado además con el Uniao de Leiria.