A los dos les fue mal.
Resultados diferentes pero, finales parecidos, tuvieron la Selección Nacional sub 20 y, el club el Nacional que, el mismo día, disputaron sus cotejos internacionales. Los jóvenes, creo que cumplieron bastante bien, aunque algo falló en la conducción; y, los "puros criollos", que fueron vapuleados por los paraguayos, equipo de su mismo nombre, en forma bochornosa, con un marcador nunca alcanzado en la ciudad de Quito y, peor todavía, jugando como dueños de casa, a 2.850 metros sobre el nivel del mar.
Los dirigidos por Julio César Rosero, no perdieron ningún partido, ganaron un encuentro, empataron tres cotejos, habiendo conseguido seis puntos, al igual que Colombia, Argentina y Venezuela. Pero, por haber obtenido un empate a cero goles con Colombia, estaban obligados a sortear el último cupo del grupo. Y, ganaron en el sorteo los norteños y, nos dejaron fuera del torneo. Pero, creo que al hacer un pequeño comentario de lo que fue toda su participación, tenemos que señalar lo siguiente: demostraron ser un buen grupo de jóvenes con, bastante calidad individual; hubo por lo menos, tres partidos que pudieron ganar si, la puntería de sus delanteros hubiera funcionado; en la parte defensiva estuvieron bastante bien. Sin embargo, para mí, la presencia del técnico Rosero y, del técnico Vizuete (del equipo mayor), confundió a los jugadores que, parecía que no comprendían, con claridad, lo que se debía hacer en el terreno de juego.
No creo que ninguno de los equipos de este grupo, a excepción quizás de Perú, fue mejor que los otros. Tanto así que, terminaron con igual puntuación. Posiblemente, solamente Uruguay, estuvo deslotado en el evento sudamericano. Sin embargo, fue la suerte, la que nos dejó fuera del torneo. Muchos dirán que "otra vez será". Pero, hay que recordar que, esa no es una excusa valedera. Seguramente, varios pensarán que se hizo lo que se pudo. Pero, yo creo que siempre, hay que hacer algo más de los que se podía hacer. Es de esperar, por lo tanto, que la FEF mantenga este grupo de jóvenes, ya que, son el futuro del balompié rentado ecuatoriano.
Y ahora, que podemos decir de El Nacional. Que los últimos tres años ha vendido un elevado número de jugadores al extranjero. Pero, nunca fueron estos reemplazados como se debía hacer. Todos los equipos que llegan a posiciones destacadas, venden algunos jugadores. Pero, siempre contratan jugadores de igual o parecida calidad. Cierto es, que han contratado varios elementos de valor en el plano futbolístico. Más, ¿quieren a los colores que están defendiendo? Yo creo que no. Y, si esta situación no fue vista por el técnico del equipo o, por los dirigentes, algo está totalmente mal. Recuerden que, la ventaja que El Nacional brinda a sus adversarios en el plano internacional, al no poder contratar a jugadores que no sean ecuatorianos, es demasiado para cualquier elenco. Y, como dice el viejo dicho: "para muestra, basta un botón". O acaso, ¿es comprensible el 5 por 0 que recibieron?
Seguramente, le culparán al técnico del plantel y, seguramente, lo sacarán de su trabajo. Pero, ¿será el único culpable? No y, definitivamente no. Ya es hora que los dirigentes del equipo militar analicen con tranquilidad y, revean esa absurda posición que tienen en sus estatutos. Pasa sin problemas, el tener solo jugadores ecuatorianos para el torneo nacional; pero, para los internacional no. Es mucha la ventaja que se otorga a equipos de otras latitudes. Sin embargo, son solamente ellos, quienes pueden componer esta situación. Ahora, ya están fuera de la Copa Libertadores. Pero, tienen que enfrentar desde esta semana, el campeonato nacional de fútbol.
Todo se encuentra en cero, en las dos participaciones; y, aunque está tan trillado, simplemente diremos que, "la próxima vez, haremos algo mejor, en cada una de las participaciones del fútbol ecuatoriano, a nivel internacional". Que así sea.