Campeón olímpico brasileño Cielo recibió consejo de Phelps antes de su final
El nadador brasileño César Cielo, campeón olímpico de los 50 metros libres, aseguró hoy que el estadounidense Michael Phelps le dio un consejo antes de la carrera en la que ganó el único oro en el casillero de Brasil en Pekín.
Phelps, que acababa de ganar su séptimo oro en los 100 metros mariposa por una centésima de segundo por delante del serbio Mirolad Cavic se dirigió a Cielo y le dijo: "¿vas a dejar que eso te pase a ti? Llega fuerte con la mano en la pared", según relató el nadador brasileño en una rueda de prensa a su llegada a Brasil.
Cielo, que también se colgó el bronce en los 100 metros libres, explicó que no es amigo de Phelps, pero que se conocen de encontrarse en los torneos Grand Prix de Estados Unidos, país en el que entrena desde hace tres años, motivo que le ayudó en su éxito olímpico, según sus palabras.
"Todo lo que falta en Brasil es más competiciones. En los torneos en Estados Unidos, miro hacia el lado y está Phelps. Así te acostumbras a competir con los mejores. En Brasil tenemos buenas competencias, pero es diferente del nivel del exterior. En mi caso, cualquier centésima vale mucho", comentó.
El único campeón olímpico de Brasil hasta ahora en los presentes Juegos afirmó que la presea dorada estuvo precedida de "mucha responsabilidad" y de "muchas derrotas", por lo que el oro supuso para él "un sueño realizado".
El nadador manifestó que espera que el oro -primero en la historia de Brasil en natación- marque "el comienzo de una carrera de muchos récords".
"El oro llegó, pero quiero bajar mi tiempo cada vez más. Lo más difícil no es ganarle a los otros, y sí a uno mismo. El nadador conoce su límite y la natación es una lucha diaria. Cada vez más van a aparecer dificultades, por lo que es preciso creer siempre", analizó.
Cielo regresó hoy a tierras brasileñas y desfiló por varias de las principales avenidas de Sao Paulo en un camión del cuerpo de bomberos para saludar y recibir el cariño de sus compatriotas.
Tras el aterrizaje, el campeón recibió una mala noticia, la muerte de su abuelo Alcides, ocurrida hace un mes y que la familia se la había callado para que no le afectara en su preparación para los Juegos.
"Es difícil. Agradezco a mi familia por haberse callado, porque me podría haber afectado emocionalmente. Es una pena recibir una noticia de este tipo en medio de tanta felicidad", concluyó. EFE
Phelps, que acababa de ganar su séptimo oro en los 100 metros mariposa por una centésima de segundo por delante del serbio Mirolad Cavic se dirigió a Cielo y le dijo: "¿vas a dejar que eso te pase a ti? Llega fuerte con la mano en la pared", según relató el nadador brasileño en una rueda de prensa a su llegada a Brasil.
Cielo, que también se colgó el bronce en los 100 metros libres, explicó que no es amigo de Phelps, pero que se conocen de encontrarse en los torneos Grand Prix de Estados Unidos, país en el que entrena desde hace tres años, motivo que le ayudó en su éxito olímpico, según sus palabras.
"Todo lo que falta en Brasil es más competiciones. En los torneos en Estados Unidos, miro hacia el lado y está Phelps. Así te acostumbras a competir con los mejores. En Brasil tenemos buenas competencias, pero es diferente del nivel del exterior. En mi caso, cualquier centésima vale mucho", comentó.
El único campeón olímpico de Brasil hasta ahora en los presentes Juegos afirmó que la presea dorada estuvo precedida de "mucha responsabilidad" y de "muchas derrotas", por lo que el oro supuso para él "un sueño realizado".
El nadador manifestó que espera que el oro -primero en la historia de Brasil en natación- marque "el comienzo de una carrera de muchos récords".
"El oro llegó, pero quiero bajar mi tiempo cada vez más. Lo más difícil no es ganarle a los otros, y sí a uno mismo. El nadador conoce su límite y la natación es una lucha diaria. Cada vez más van a aparecer dificultades, por lo que es preciso creer siempre", analizó.
Cielo regresó hoy a tierras brasileñas y desfiló por varias de las principales avenidas de Sao Paulo en un camión del cuerpo de bomberos para saludar y recibir el cariño de sus compatriotas.
Tras el aterrizaje, el campeón recibió una mala noticia, la muerte de su abuelo Alcides, ocurrida hace un mes y que la familia se la había callado para que no le afectara en su preparación para los Juegos.
"Es difícil. Agradezco a mi familia por haberse callado, porque me podría haber afectado emocionalmente. Es una pena recibir una noticia de este tipo en medio de tanta felicidad", concluyó. EFE