Phelps, el hombre de oro sumó su octava de medalla dorada y batió el record. (Resumen día 9)

Enviado por carlosefrain el Dom, 17/08/2008 - 11:08
El nadador estadounidense Michael Phelps se ha convertido en Pekín en el hombre de oro de la historia de los Juegos Olímpicos, testigos hoy de la consagración del español Rafael Nadal como el mejor tenista del orbe.

Phelps consumó hoy en la piscina del Cubo del Agua el más difícil todavía, la mayor cosecha dorada en el siglo largo de historia del olimpismo.

Ocho medallas de oro en unos mismos Juegos es una marca que nadie había hecho antes. Mark Spitz, su compatriota e inspiración, se quedó en siete hace 36 años en los Juegos de Múnich.

Otro dato apabullante. Si Phelps fuera un país estaría quinto en la clasificación del medallero, empatado con Corea, Japón y Australia a ocho oros y sólo superado por China, su propia nación, Gran Bretaña y Alemania.

"Quiero ser el primer Michael Phelps, no el segundo Mark Spitz", afirmó hoy de forma elocuente el nadador de Baltimore para dejar definitivamente atrás esta comparación que ha sido su sambenito en los últimos años.

Nadal vive la plenitud de su carrera profesional. El oro logrado hoy ante el chileno González por 6-3, 7-6 (2) y 6-3 es la culminación de una temporada de ensueño, en la que ha adjudicado Roland Garros y Wimbledon y apenas dentro de unas horas será proclamado número uno del mundo.

El título logrado hoy supone también la primera medalla de oro del tenis español, que ya había subido una decena de veces al podio pero nunca antes a peldaño más alto.

El chileno González, único que ha revalidado medalla con respecto a Atenas, peleó hasta el final como es habitual en él, pero cedió ante el empuje de la mejor raqueta del momento. Aún así es ya el más laureado de Chile en unos Juegos con una medalla de cada metal.

La final femenina, con pleno sabor ruso, se la adjudicó Elena Dementieva al derrotar a su compatriota Dinara Safina por 3-6, 7-5 y 5-3.

El otro oro de tenis que se concedió hoy fue para las hermanas estadounidenses Venus y Serena Williams, que barrieron de la pista a las españolas Vivi Ruano y Anabel Medina (6-2 y 6-0).

La natación se despidió de Pekín con el asombroso saldo de 25 récords del mundo, en Atenas hace cuatro años sólo se batieron ocho. La explicación hay que buscarla, según los técnicos, en los nuevos bañadores y en una piscina excepcionalmente rápida.

Estados Unidos ha sido el gran dominador de la piscina con 31 oros, once más que los australianos, cuya gran figura ha sido Lisbeth Trickett, con tres títulos.

Un lugar privilegiado también ocupa el brasileño Cesar Cielo, que le dio a Brasil y a la natación sudamericana su primer oro olímpico con su emocionante triunfo en los 50 metros libre.

Gervasio Deferr no pudo hacer realidad su objetivo de convertirse en el primer tricampeón olímpico español, pero la plata obtenida en suelo le perpetúan como el mejor gimnasta nacional de todos los tiempos, tras los oros en salto de Sydney y Atenas. Hoy le apeó de lo más alto del podio el chino Zou Kai.

En la otra final masculina disputada hoy, la de caballo con arcos, el equipo local siguió acaparando oros con el de Xiao Qin, triple campeón mundial.

La final femenina de salto dio como ganadora a la norcoreana Hong Un Jong y la de suelo a la rumana Sandra Izbasa.

Jamaica es claramente la referencia de la velocidad en el atletismo de Pekín 2008. Si ayer Usain Bolt dejó atónito al mundo con sus 9.69, estratosférico nuevo récord del mundo, hoy el hectómetro femenino estuvo copado por sus compatriotas Shelly-Ann Fraser (10.78) y Sherone Simpson y Kerron Stewart, que compartieron la plata con la misma marca de 10.98.

El etíope Kenenisa Beleke revalidó con autoridad el título de 10.000 metros con 27:01.17. Nadie ha sido capaz de vencerle en sus once últimas carreras de los 10 km.

El maratón femenino fue para la rumana Constantina Tomescu (2h 26:44) y el triple femenino para la camerunesa Francoise Mbango Etone (15,39).

Las diferencias en el medallero entre China y Estados Unidos aumentan cada jornada. Hoy les separan nada menos que 16 oros. El país anfitrión acumula 35 títulos y el norteamericano 19. EFE