El Camp Nou ya dispone de un nuevo césped, situado doce centímetros más bajo que el anterior y con 52 aspersores inteligentes nuevos, después de que los trabajos de reinstalación estén a punto para acoger el primer partido de la temporada, ante el Wisla de Cracovia en la previa de la Liga de Campeones, el próximo miércoles.

Eduald Morera, portavoz de la empresa Royal Verd, encargada de la renovación del césped del Barça, ha explicado a EFE que la nueva alfombra verde tiene "tanto ventajas agrónomas como visuales".

Por un lado, ha dicho Morera, el antiguo césped tenía una "caja de arena más grande que perjudica el movimiento del balón", por lo que se ha retirado el sustrato de tierra, que venía siendo el mismo desde 1994, con lo que se ha conseguido rebajar el césped 12 centímetros y en algunas zonas, como el centro del campo, hasta 25.

Por otro lado, "la reducción de la altura del césped permite que desde el banquillo, el técnico vea mejor lo que pasa en el campo". De hecho, desde el club ya hace tiempo que se estaba barajando esta posibilidad, ya que diversos entrenadores azulgranas se habían quejado de que el césped era demasiado alto para seguir con precisión a los futbolistas.

La otra gran innovación es la instalación de 52 aspersores inteligentes en 52 parcelas diferentes que favorecerán un tratamiento específico para cada área del campo y diferenciarán las zonas que necesitan un mayor o menor riego y, de este modo, propiciarán "un ahorro de agua necesario", ha asegurado Morera.

Las reformas del césped del Camp Nou se empezaron a hacer el pasado 27 de julio y no estarán finalizadas del todo hasta el próximo 11 de agosto, dos días antes del partido ante el Wisla.

Mañana, viernes, se colocarán las porterías y el lunes se ultimará el detalle final, pintar las líneas del terreno de juego. EFE